La causa que investiga la feroz balacera en un cantobar de calle Juan B. Justo al 8400 donde murieron asesinados un policía que hacía vigilancia adicional y otro hombre, además de tres personas heridas, sigue haciendo aflorar el trasfondo del caso. La Justicia imputó este miércoles a cuatro personas como partícipes necesarios del atentado, y se confirmó que una de las armas secuestradas en un allanamiento era la reglamentaria del policía asesinado, Ricardo Medini. 

Pero este jueves se dio a conocer que personal de la Agencia de Control Policial realizó tras las imputaciones una serie de allanamientos en Pérez y en Rosario, donde se secuestraron tres armas de fuego que estaban en poder del jefe de la subcomisaría 21° de Rosario, con jurisdicción en el mismo barrio de la balacera, 7 de Septiembre. Se trata de un inspector policial cuyas iniciales son C. E. P.

El fiscal a cargo de la pesquisa, Alejandro Ferlazzo dispuso que se lo identifique por el delito de "tenencia indebida de arma de fuego", pero no estableció su detención.

Las requisas se realizaron en Pasaje del Bicentenario al 400 de la localidad de Pérez, domicilio del titular de la subcomisaría, y en una finca de Don Orione al 900 de Rosario, propiedad donde habita otro integrante policial de la mencionada dependencia. 

Al inspector se le secuestró, además de su arma reglamentaria, otras armas de fuego siendo estás una escopeta de un caño, calibre 16, un revólver calibre 22 y un revólver calibre 38, de los cuales carecía de documentos y que serían de interés para la investigación. Así como también balas y varios celulares, de interés para la investigación.