¿Cuál era la situación del país en ese entonces?

Los años 60, se caracterizaron por ser una década de cambios y revoluciones en el mundo. Mientras que los países se encontraban expectantes ante la guerra ideológica entre la Unión Soviética y los Estados Unidos (Guerra Fría), donde ambas potencias trataban de imponer sus ideologías en el globo, comenzaron a emerger en la sociedad dos actores sociales importantes: las mujeres y los jóvenes.

Sin embargo, en ese entonces, Argentina se encontraba en un periodo de sucesión de gobiernos de facto que comenzó con la dictadura de 1955 que derrocó a Juan Domingo Perón. Desde ese momento, perduró un intento de borrar del marco político al peronismo y comenzaron las medidas represivas ante aquellos que se encontraban en desacuerdo; inclusive se lanzó una proscripción peronista.

Durante este tiempo, el inconformismo y las revoluciones sociales se hicieron sentir en el país. Las medidas sociales impuestas por Juan Domingo Perón, habían generado una afinidad de las clases trabajadoras hacia el presidente derrocado, por lo que su destitución provocó un malestar general en la sociedad.

Diez años más tarde, transcurría el tercer gobierno de facto desde el golpe de 1955. Cabe destacar,  que en el medio existieron gobiernos democráticos que no pudieron mantenerse porque la situación se encontraba insostenible. Juan Carlos Onganía, quien había destituido a Arturo Humberto Illia, tomó el poder en julio de 1966 por medio de la dictadura denominada “Revolución Argentina”. Durante su mandato, todo el poder pasó a estar concentrado en él, y estableció medidas represivas hacia sus opositores.  

No obstante, las revueltas sociales tomaron un papel importante en esta etapa. En aquellos días, Onganía pretendía imponer un orden moral estableciendo una sociedad católica con ideales occidentales. Empero, emergió en aquel entonces un grupo social que atentó contra estos ideales y que se convirtió en una amenaza ante los ojos de la dictadura: los jóvenes. Como respuesta, el dictador decidió irrumpir en las universidades y reprimir a los estudiantes.

“Operativo Cóndor”- Objetivo: Islas Malvinas.

Durante esta época, diferentes organizaciones sociales conformadas por jóvenes estudiantes, trabajadores y miembros de la oposición, comenzaron a tomar medidas por sí mismas.

La madrugada del 28 de septiembre de 1966, durante el gobierno de Onganía, el avión Douglas DC-4 perteneciente a Aerolíneas Argentinas despegó desde el Aeroparque Jorge Newery, Buenos Aires, con destino a Río Gallegos, Santa Cruz.  

Tras cinco horas de viaje, a las seis de la mañana, un grupo armado conformado por 18 estudiantes y obreros peronistas, se levantaron de sus asientos y le exigieron al comandante del avión que redirija el vuelo hacia la ciudad Puerto Stanley, de las Islas Malvinas (hoy conocida como Puerto Argentino). Tres horas más tarde, el avión aterrizó en el archipiélago, y una vez en tierra los “cóndores” comandados por Dardo Cabo, desplegaron siete banderas argentinas en la periferia de la nave; incluso denominaron a la ciudad Puerto Rivero, en homenaje al gaucho Rivero por las hazañas en la resistencia de las invasiones inglesas a la ciudad de Buenos Aires de 1806 y 1807.

En ese momento, las autoridades de las islas les solicitaron a los tripulantes que regresen al país. Sin embargo, estos se mantuvieron dentro del avión durante un día custodiando las banderas desplegadas. Para evitar un desenlace trágico, el arzobispo de dicho lugar, el Padre Rodolfo Roel, medió la situación, y los patriotas junto con el resto de la tripulación fueron llevados después de dos días, hasta el buque ARA Bahía Buen Suceso.

Más tarde, fueron enviados a Tierra del Fuego y condenados a prisión por el hecho de desviar la nave y contar con armamento militar. Sin embargo, lo ocurrido en Malvinas no fue considerado como delito. La mayoría de estos, cumplieron una condena de nueve meses, excepto Dardo Cabo quien ya contaba con antecedentes penales y pasó por tres años de cárcel. Diez años después, el líder de este operativo fue fusilado en manos de la dictadura militar de 1976, en el denominado Proceso de Reorganización Nacional. 

Las leyes de reconocimiento de la disputa de las Malvinas de parte de la Unión Cívica Radical, no eran suficientes para la militancia juvenil peronista. Por lo tanto,  tenían a las islas como uno de los puntos centrales de su accionar. Si bien, el objetivo era demasiado ambicioso lograron que numerosos diarios del mundo reconozcan y escriban sobre esta hazaña. Por este motivo, se recuerda el 28 de septiembre como el inicio del “Operativo Cóndor”.