Los dueños de chapas de taxis admitieron este lunes que es necesario un reajuste de la tarifa y sostuvieron que el desfasaje es del 100%, más allá de un claro avance en la demanda. Los cálculos de los titulares estiman que el precio del servicio debería incrementarse entre por arriba del 35%.

Los titulares de licencias de taxis ya hacen los primeros movimientos en pos de un reajuste de tarifa. Entienden que la actual presenta un desfasaje “del cien por ciento”, y si bien admiten que hubo un repunte notable de trabajo, consideran que para antes de fin de año el precio del servicio debería aumentarse “un 35 o 40 por ciento”.

Desde la Cámara de Titulares de Licencias de Taxis de Rosario (Catiltar) afirmaron a Rosarioplus.com que los números que hoy manejan son muy malos, entendiendo que el último estudio de costos del mes de mayo el desfasaje tarifario era del 70%, sumados a esto otros incrementos, como el GNC y otros insumos indispensables para un buen funcionamiento.

Marcelo Díaz, miembro de la Cámara confió que el momento que viven los taxistas es “muy complicado” porque se perdió mucha rentabilidad. La semana pasada tuvimos una reunión con Eva Jokanovich -secretaria de Movilidad municipal- por el cronograma que nos puso el Estado ante la alta demanda de servicio y le manifestamos que el estudio de costos es viejo y no se hace desde el mes de mayo, por lo que sabemos, hoy en día hay un desfasaje muy alto en la tarifa por eso es necesario que la funcionaria eleve al Concejo para que se haga un nuevo estudio”, añadió.

A pocos días de las elecciones los titulares apuestan a que la suba de la tarifa se de en los primeros días de diciembre ya que según expusieron “ningún sector partidario les va a dar una respuesta inmediata porque es político lo que está en juego” y puede ser visto como desfavorable a la hora de obtener votos.

Pero el reclamo no es sólo por la tarifa, además le piden a los miembros del Palacio Vasallo que se haga efectiva la prórroga de antigüedad de las unidades ya que 300 de ellas deberían ser renovadas a finales de este año, pero resulta imposible después de casi un año y medio de pandemia donde prácticamente el trabajo fue nulo, si las cosas siguen de esta forma anunciaron que muchos deberán correrse de la actividad que por ahora “no es rentable”.

“Pagamos seguros de 10mil pesos, las cubiertas con alineación y balanceo salen más de 80mil. Lo único con lo que nos defendemos es con la tarifa y si bien tenemos nuestros números nos manejamos con los que dice la municipalidad, inclusive siempre pedimos un poco menos de lo que dicta el estudio de costos. Hoy un taxi en la calle es una dificultad a la hora de solventar, mi última factura de GNC fue de 25mil pesos y necesito 60 mil más para amortizar todos los gastos”, señaló Díaz.  

A esto dijo el titular, ante la enorme demanda de servicio, es imposible hacer más viajes de los que estipulan por hora, “es cierto que hay menos cantidad de autos”, aseguró porque en pandemia “se bajaron choferes y se fueron a otra actividad y muchos se quedaron con un solo chófer” que no logra cubrir a todos los pasajeros que buscan este servicio. Díaz sugirió como salida a que nuevamente se abra la bolsa de trabajo por parte del Municipio y se le de facilidades a quienes quieran ingresar a este rubro para trabajar.