En el contexto de alta inflación que atraviesa el país, las panaderías no se encuentran exentas y ya advirtieron que en Rosario habrá un inminente aumento en el precio del pan, de manera que el kilo llegará a los $1.600.

La devaluación del 100% que anunció Luis Caputo en diciembre, sumado a la desregulación económica, que incluye la finalización de programas como el fideicomiso de la harina, impactan con fuerza en los productos de la canasta básica.

Desde aquel momento los panaderos aplicaron ajustes cercanos al 30% y avisan que se viene un nuevo retoque. Consideran que la suba es inevitable teniendo en cuenta los aumentos en harina, margarina y otros insumos indispensables.

En declaraciones radiales, el referente de la Cámara de panaderos locales, Diego Rubio, confirmó que el aumento del kilo de pan llegará al 15% en estos días, y de esta manera el precio del kilo en los barrios rondará los $1.600.

Al ritmo que va la inflación, advierten que los ajustes serán mensuales, teniendo en cuenta que los insumos van, en muchos casos, por encima del promedio del índice de Precios al Consumidor.

Si bien reconocen que desde diciembre el pan aumentó un 30%, denuncian que en ese mismo período la harina que recibía un subsidio del Estado se incrementó un 200%, mientras que la harina que estaba por fuera del programa lo hizo en un 100%.

Más allá del incremento que se viene, aseguran que no tienen en claro cuál debería ser el costo de mercado, ya que cada vez que lo elaboran queda viejo.

A esto hay que sumarle que en los próximos meses comenzarán a ponerse en marcha fuertes ajustes en servicios de gas y electricidad, que presionarán aún más la composición de costos para el sector panadero, trasladándose indefectiblemente a precio.