La láctea SanCor parece estar en caída libre. Luego de que el gobierno nacional desechara un salvataje para darle respiro al enorme pasivo de la empresa, los indicios de crisis se empiezan a hacer evidentes: según las últimas informaciones, cuatro plantas cerrarían arrastrando a unos 500 trabajadores.

Los rumores de despidos tomaron fuerza este martes por la noche en boca del sindicalista de Camioneros, Pablo Moyano, quien advirtió a través de un comunicado el riesgo de pérdida de puestos de trabajo del ramo lácteo. Como respuesta al eventual cierre lanzaron un paro de actividades.  

Cuando se habla de cerca de 500 trabajadores se alude al staff de las plantas de SanCor ubicadas en las localidades de Brinkman, Charlone, Moldes y Centeno en el centro santafesino, las que no tuvieron actividad a principios de semana. Según el sitio especializado Nuestro agro, el panorama es peor: las plantas ya están cerradas y no recibirán más materia prima.

La Asociación de Trabajadores de la Industria Lechera de la República Argentina (Atilra) aclaró en un comunicado que la empresa confirmó "la necesidad de producir una reestructuración" que implique un "achique en la cantidad de plantas, usando los mismos procedimientos que se han usado en el pasado como son los retiros voluntarios, las jubilaciones y los traslados".

La idea se replica en la Mesa de Productores Lecheros de Santa Fe (Meprolsafe) alertó que "se viene la noche para la lechería argentina", y que "la desaparición de tambos traerá aparejado un inevitable achicamiento industrial con cierre de plantas y atraso tecnológico".

Antecedentes

SanCor ya estuvo a punto de fundirse pero durante el kirchnerismo se consiguió un acuerdo para vender leche en polvo a Venezuela y la situación repuntó. Ahora el apsivo es tan grande que no puede pagar los sueldos de los empleados y evidencia retrasos en los pagos a proveedores de materia prima.

Vale recordar que los directivos de SanCor mantuvieron reuniones con el propio presidente Mauricio Macri y le solicitaron 4.000 millones de pesos pero no tuvieron respuesta positiva. Macri contestó que ya habían resuelto un préstamo y no había logrado soluciones.