Cerca de las diez de la mañana explotó un cable subterráneo, un alimentador de la red de media tensión, de la EPE bajo la vereda del Pami 1, en Sarmiento al 400. La explosión hizo levantar parte de la calzada de la vereda y provocó daños menores en algunos vehículos que se encontraban cerca. No hubo que lamentar heridos. Y si bien por algunos minutos la zona quedó sin suministro, una hora después el servicio había sido restablecido por los operadores del sistema radial de la empresa distribuidora.

El sonido y la vibración del estallido se sintieron en varios edificios de la cuadra. A escasos metros de allí, en Sarmiento al 300, la distribuidora estatal posee una estación transformadora que abastece de energía a buena parte del centro de la ciudad.

A pesar del revuelo, el tránsito circula con normalidad, y el servicio quedó normalizado. Ahora, sólo resta arreglar la vereda y lavar los autos que estaban estacionados cuando sobrevino la explosión.