Hervir el agua, agregarle unas gotas de lavandina. Son muchas las formas en las que, en diferentes partes del mundo, intentan depurar el agua. Es que si el agua no está suficientemente limpia para beber puede generar enfermedades. Y el agua, se sabe, es necesaria para vivir.

Pero científicos de la Universidad de Stanford y el Laboratorio Nacional SLAC desarrollaron un genial invento. Muy chiquito, pero muy útil. Es un rectángulo de vidrio diminuto que aprovecha la energía solar para matar gérmenes en el agua. Y se toma solo unos 20 minutos. 

Si bien está en etapa de desarrollo, viene bien. En las pruebas del equipo, el dispositivo logró destruir la mayoría de los gérmenes en 25 ml de agua con una concentración bacteriana de 1.000.000 por ml en 20 minutos.