Un hombre terminó detenido este martes por policías de Seguridad Vial que descubrieron un contrabando de pichones de loros en su camioneta, cuando arribaba a Rosario por la autopista Brigadier López.

En un control de rutina, en el kilómetro 0 de la autopista, agentes de la APSV interceptaron una camioneta Ford a cuyo conductor le requirieron la documentación de rigor. Pero en ese instante, llamó la atención del agente ciertos sonidos extraños que surgían desde el habitáculo, un parloteo extraño que enseguida lo puso en alerta.

El conductor tuvo que mostrar entonces lo que llevaba en una caja depositada sobre el piso de la pick up, en el habitáculo del acompañante. Allí viajaban dos docenas de loritos de corta edad, que fueron secuestrados de inmediato.

Daniel Ojeda de la policía ecológica, señaló que los pichones estaban en una caja, "en malas condiciones, hacinados", y que al conductor se lo arrestó a disposición de Fiscalía, que lo indagará ante la posibilidad de que se trate de una organización de contrabando de fauna silvestre.

"La venta de fauna silvestre autóctona está prohibida. Los loritos serán asistidos por un veterinario. Algunos morirán probablemente por el maltrato del viaje, sin agua ni ventilación. Los que sobrevivan serán destinados a la granja La Esmeralda en Santa Fe en los próximos días", precisó Ojeda.

Trascendió que el conductor había comprado los pichones por 150 pesos cada uno, y planeaba revenderlos a 450 pesos por ejemplar.