Un equipo de científicos de las universidades de Dundee y Edimburgo, en Escocia, descubrieron que las características en una proteína natural permitirían que los helados posean una mayor resistencia al calor y de esta forma prevenir que se derritan antes de tiempo.

La proteína, conocida como BsIA, es capaz de unir los ingredientes básicos del helado (aire, grasa y agua), lo que genera una textura más fina y suave, sin cristales de hielo arenosos, justo como debe de ser un buen helado, pero con una resistencia al calor muy superior a la que tienen actualmente.

Este nuevo ingrediente permitiría a los helados no sólo ser más resistentes al calor, sino también permitirían generar productos con niveles más bajos de grasas saturadas y menor cantidad de calorías. Además, al no necesitar tanta refrigeración para mantener su estado original significaría un ahorro energético para los vendedores.

Sus creadores estiman que este nuevo ingrediente podría estar disponible para las empresas de helados en 3 o 5 años más. Esperaremos pacientes.

Fuente: Fayerwayer