En el acto central, que se llevó adelante en la Plaza 25 de Mayo en la ciudad de Santa Fe, antes del tradicional desfile cívico militar, el gobernador Miguel Lifschitz encabezó la celebración del 208° aniversario de la Revolución de Mayo donde recalcó como “indispensable recuperar una noción de Patria que ampare a todos".

Durante el acto analizó este 25 de Mayo que “convoca la celebración de un acontecimiento que hace a los inicios de nuestra Patria como Nación independiente. No es una fecha más, es un momento fundante que nos compromete como argentinos”.

En cuanto a la situación social, se refirió a la necesidad de "crear fuentes de trabajo", a la que calificó como "un desafío pendiente en nuestra sociedad. Es un reclamo ético y social tanto a la dirigencia política como económica”.

Previo al desfile, Lifschitz participó del Tedeum en la Catedral Metropolitana de la Liturgia de Acción de Gracias, la última presidida por el Arozbispo de Santa Fe, Monseñor José María Arancedo, quien será reemplazado en su cargo el mes próximo.

Antes, el gobernador había recibido al gabinete de ministros y demás funcionarios, así como también a legisladores nacionales y provinciales en el salón Blanco de Casa de Gobierno, con los que intercambió saludos protocolares y compartió el tradicional chocolate.

Luego se dirigió a la Plaza 25 de Mayo, donde inauguró formalmente las obras de remodelación del espacio público que, a partir de ahora, cuenta con los mástiles más altos de la provincia. Y finalmente encabezó el izamiento del Pabellón Nacional y se entonaron las estrofas del Himno Nacional Argentino. De la actividad también participaron alumnos y docentes de diferentes escuelas de la ciudad, como ciudadanos que se acercaron a tomar parte de la celebración.

En la inauguración de los mástiles destacó que “acercan la Bandera al cielo y al sol como un mensaje, una expresión de deseo de los santafesinos” y brindó un reconocimiento a hombres y mujeres servidores públicos “que han demostrado en el desempeño de su labor cotidiana un un compromiso, actos que van más allá de sus responsabilidades habituales, que han demostrado una especial vocación de servicio que los hacen meritorios de estas distinciones”.

En ellos buscó representar el homenaje “a muchos santefesinos y santafesinas anónimas que todos los días en sus lugares de trabajo demuestran su dedicación, su responsabilidad y vocación para realizar una tarea profesional o laboral, pero también para servir a los demás; porque ese es el espíritu de Mayo que nos alimenta a todas las generaciones que transcurrieron en estos 208 años para pensar, imaginar y construir ese país que nos legaron los hombres de Mayo”, agregó.

Tras realizar un raconto histórico sobre la fecha insignia en la historia del país, el gobernador dijo que “vale la pena reflexionar sobre el proceso de la Revolución de Mayo y qué hicimos y hacemos los argentinos al respecto, porque mucho de lo ocurrido en aquella época nos sigue remitiendo al presente y al futuro. La Patria no existía como tal, era una idea".

Lifschitz analizó sobre la actualidad nacional que "la falta de objetivos claros y de metas compartidas genera incertidumbre acerca del futuro, pero no podemos mirar la historia como espectadores. Pensar en resignarnos no es un posibilidad, es faltar al compromiso con quienes nos precedieron y, más importante aún, al porvenir de nuestros hijos. Debemos confiar en la capacidad y sabiduría que tienen los pueblos para transformar la realidad y cambiar su destino".

"De aquellos que tenemos mayores responsabilidades se requiere una mirada de estadista para reconocer con franqueza y sin especulaciones los problemas que afrontamos como sociedad porque negarlos o ignorarlos demora las soluciones; un buen diagnóstico es un punto de partida ineludible para definir objetivos comunes y así construir un proyecto colectivo de largo plazo. Fue nuestro mayor desafío en estos últimos 200 años".

"Necesitamos miradas más amplias y más inclusivas, más tolerancia. Es indispensable recuperar una noción de Patria que nos ampare a todos, haciéndonos argentinos iguales, garantizando las posibilidades reales de progreso real y colectivo" pero a su vez, mencionó que "la democracia necesita un pueblo movilizado y partidos que representen en sus políticas a las mayorías nacionales y que defiendan los intereses del pueblo".

Por último, el gobernador indicó que "una Patria es más que un país, es un espacio de identidad colectiva, es un proyecto común del que somos parte, es el territorio, es la historia, la cultura, los valores compartidos. Hay un mandato de mayo que en palabras de nuestro Himno vuelve a tener vigencia: el de levantar en la faz de la tierra una nueva y gloriosa Nación, tan nueva y tan gloriosa como seamos capaces", concluyó.