Es la nueva moda en construcciones de lujo y no son casas para sirenitas. Son viviendas en las que desde la ventana de la habitación, en lugar de vistas al mar, se tienen vistas del fondo del mar. Se llama The Floating Seahorse y sus primeras viviendas ya están a la venta en Dubai.

Estas lujosas villas de tres plantas tienen la peculiaridad de tener una de esas plantas sumergida bajo el agua. En ella se encuentran, al menos, el dormitorio principal y un amplio baño.

Cada una de estas villas cuenta con tres pisos. En el intermedio, a nivel del mar, se encuentra la cocina y el comedor, así como una zona descubierta donde poder tomar el sol y darse un baño. Están equipadas con lo último en tecnología y conexión a internet. Entre las tres plantas suman hasta siete habitaciones.

Bajo ellas, la empresa promotora ha creado arrecifes artificiales. No en vano, el nombre del proyecto hace referencia a los caballitos de mar, una especie amenazada con la que el Grupo Kleindienst, encargado del proyecto, se encuentra comprometido con su protección.

Con valores entre el millón y el millón y medio de euros (más de 17 millones de pesos), estas casas son flotantes y están levantadas sobre aguas del Golfo Pérsico, a apenas dos millas de la costa dubaití. Ya se han construido 42 en esta ubicación, cada una de 520 metros cuadrados.

Y según parece, varios países como Rusia, Mónaco, Suiza, Portugal o Suecia ya mostraron su interés y se espera que para 2018 haya alrededor de 125 nuevas villas flotantes en Europa.