El flamante edil de la ciudad de Santa Fe, Saúl Perman, ya presentó el primer proyecto polémico en el Concejo de la capital provincial: que todos los integrantes del cuerpo lleven adelante unos minutos de meditación al inicio de cada sesión. El hombre obtuvo una banca tras una alianza del Partido Conservador y el Partido Autonomista y ya había anticipado una serie de iniciativas insólitas durante la campaña.

Puntualmente, el proyecto de decreto propone "un tiempo destinado a la meditación" de cinco minutos antes del inicio de cada sesión al tiempo que impulsa una capacitación -por única vez- a cargo de un profesional que "instruirá a los legisladores locales en las técnicas de meditación más convenientes para el contexto en el que se llevarán a cabo".

"La meditación contribuye a disminuir el estrés y la ansiedad, y mejora los niveles de productividad en las actividades que requieran esfuerzo mental, enfocando al individuo en el tiempo presente”, argumenta y agrega: "Brinda herramientas para regular y equilibrar las emociones, beneficia la empatía y, por lo tanto, la comunicación y el entendimiento con otras personas, a la vez que favorece la resolución pacífica de situaciones conflictivas".

El hombre que realizó su campaña electoral arriba de una bicicleta, con un megáfono y repartiendo abrazos ya había adelantado sobre sus propuestas naturistas y relacionadas con una alimentación consciente.