Rosario Central, en un partido en el que Broun fue figura, le ganó a San Lorenzo, en el Gigante de Arroyito, con un gol agónico de Luca Martínez Dupuy sobre el final del encuentro.

El Canalla sufrió en la mayoría del partido, pero con la esperanza intacta hasta el final, consiguió quedarse con tres puntos vitales que dan un oxígeno necesario para seguir en la pelea.

Central salió al primer tiempo mejor y convencido a quedarse con los tres puntos en Rosario. Los primeros minutos del Canalla fueron muy buenos, y a los 5, creó la primera clara desde una buena jugada de Blanco, que conectó con Ruben, el delantero encaró en el área, tiró el pase atrás, y Ferreyra no llegó a empujar.

El equipo del Kily dominó hasta los 15, haciéndose dueño de la pelota, pero después, con el pasar de los minutos, San Lorenzo comenzó a asentarse y el Canalla fue replegando hasta ceder el protagonismo total a los de Montero.

El Ciclón comenzó a lastimar la defensa canalla, que tuvo muchas dificultades para marcar a los delanteros del conjunto visitante. Central contó con un Broun muy atento, que resolvió todas y fue figura de la primera parte.

El segundo tiempo fue un calco al final del primero. San Lorenzo dominó desde los primeros minutos a un Central que no encontraba respuestas, y que tampoco encontró en los cambios de su DT un cambio de rumbo. Broun fue la figura del equipo dirigido por Kily González, haciéndose enorme en el arco canalla.

La más clara, el Ciclón, la tuvo en los pies de "Uvita" Fernández, que quedó pie a mano con Broun, pero el arquero canalla, otra vez, respondió de manera notable para evitar la ruptura del empate a cero. En el rebote, Almada tapó un disparo que iba directo al arco, donde ya no estaba Fatura.

Después de esa jugada, Central, con el ingreso de Francesco Lo Celso, comenzó a dominar más la pelota y aprovechó el cansancio de los de Montero, que bajaron la intensidad en el tramo final.

El Canalla comenzó a lastimar por las bandas mediante sus dos laterales, que llovieron de centros el área rival. Y a falta de cuatro para el final, desde un centro de Blanco, Dupuy cabeceó como dice el manual, desde donde viene la pelota, pero apareció un enorme Torrico para, a contra pie, rechazar el remate, Ruben volvió a centrar desde el piso, y la pelota le quedó a Zabala, que vio como Dupuy quedó solo tras el cabezazo, y el delantero esta vez no falló, le rompió el arco para un festejo desatado que le dio la victoria final a los de Arroyito.

En la siguiente jornada, el Canalla viajará a Córdoba para, el sábado a las 15.45 enfrentar al puntero Talleres, en busca de seguir con la racha de victorias.