Newell's empató en un partido agónico con Audax y salvó el invicto en Copa Sudamericana. El equipo del Gringo, con muchas rotaciones, arrancó dormido y poco a poco se fue despertando, hasta llegar al empate en la última jugada del encuentro.

En un primer tiempo que se dividió en dos partes muy claras, se vio un Newell's apagado y dormido en los minutos iniciales, en donde Audax no solo rompió el empate sino que mereció estirar el resultado. Pero a medida que pasaron los minutos los de Heinze se acomodaron, generaron y desperdiciaron chances exageradas para poner las tablas.

El arranque fue sinuoso, ya que en el primer minuto de juego Reasco tuvo en sus pies la chance adelantar a su equipo. Pero mientras ambos pasaban ese momento para acentarse, los chilenos armaron una gran jugada en ataque, el Chelo Díaz habilitó a Cereceda y el delantero, eludiendo a Barlasina, estampó el primer tanto en el marcador.

Esos minutos posteriores fueron los peores de Newell's en Copa. Audax dominó y encontró espacios por todos lados para lastimar a la defensa leprosa, pero por suerte para los de Heinze, los delanteros del conjunto chileno no estuvieron del todo finos, mientras que Barlasina se hizo enorme en la única que iba al arco.

Newell's pudo aguantar esos minutos y poco a poco fue saliendo del fondo. Con buenas internvenciones de los mediocampistas empezó a generar peligro en la zona de arriba y los delanteros tuvieron varias ocasiones para poner las tablas.

Gianni tuvo la primera pero su remate le salió muy centrado y el arquero rival la despejó al córner. Mientras que Reasco fue el que mayor cantidad de jugadas generó, aunque también el que más desperdició.

El arranque de la segunda mitad no tuvo nada que ver al ida y vuelta que se pudo ver en gran parte de la primera. Newell's entró impreciso y la visita salió decidido a defender el resultado.

Heinze no aguantó el desarrollo del segundo tiempo y metió mano rápidamente en el equipo, con el ingreso de Brian Aguirre e Iván Gómez, pero a ambos les costó mucho afirmarse como para marcar la diferencia que suelen marcar cuando están desde el arranque.

A pesar de que en cuanto al juego el conjunto leproso no pudo revertir la situación, sí supo al menos luchar el resultado y llegar al empate. En la última jugada, en el último suspiro, apareció Armando Méndez y con una pirueta genial puso el 1 a 1 final.

La Lepra se quedó con un buen punto por el desarrollo del encuentro y mantuvo el invicto, pero no logró ganar para ser el mejor de la Copa Sudamericana, y no contará con la ventaja de definir de local hasta semis.