En Wimbledon, la competencia del deporte de la raqueta más importante del mundo, no todo es tenis. Hay algunas citas que son impostergables, como la fiesta que ofrece la WTA para las jugadoras que participan en el Grand Slam londinense.

Allí, las tenistas despliegan todo su glamour: transparencias, brillos, faldas muy cortas y mucho make up.

En cada celebración las deportistas suben la apuesta, porque aquí más importante que ganar un punto es no pasar desapercibida.