La música no se toca. Algo así como lo que decía Alejandro Sanz en su famosa canción es lo que reclaman más de 160 músicos y sellos estadounidenses a Youtube. Es que artistas como Taylor Swift, U2 o Paul McCartney están en pie de guerra contra la plataforma de video de Google.

En una carta enviada al Congreso de Estados Unidos, los múiscos piden que se realicen cambios y actualizaciones a la norma que rige los derechos de propiedad intelectual y tecnología, la Digital Millenium Copyright Act (DMCA), hecha en 1998, años antes de la explosión de internet, los youtubers y de la muerte de MTV.

“La DMCA ha permitido que las grandes compañías tecnológicas generen enormes ganancias al crear un uso fácil a los consumidores para poder llevar casi toda canción jamás grabada, en su bolsillo, en sus smartphones. Mientras, las ganancias de los compositores y artistas disminuyen cada vez más”, reza una parte del texto.

El organizador de todo este grupo, el manager Irvin Azoff, explicó que el uso que hace Youtube de las canciones o el acceso que permite a ellas, “amenaza la viabilidad futura de los compositores y artistas para sobrevivir”. También pidió que la red social entregue compensaciones y permita a los dueños de las canciones más control sobre estas en su plataforma.

Por su parte, YouTube se defendió de las críticas, argumentando que genera millones de dólares para la industria, y que además sí le da control a los músicos. “Ninguna otra plataforma le da tanto dinero de vuelta a los creadores, de todo tipo de contenido”, argumentó en un comunicado el sitio de videos de Google.