El día después del fallo judicial que le da nueve años de prisión a una joven rosarina cuyo bebé falleció tras un parto casero, las aguas continúan agitadas. Luego de que organizaciones feministas salieran a criticar la decisión, la jueza de la causa también habló públicamente y ofreció detalles vinculados a la sentencia.

"Nosotros seguimos insistiendo con que Yamila, al momento del parto precipitado o precario que tuvo, extrahospitalario, presentaba según informes un episodio disociativo con estado crepuscular", remarcó Nora Giacometto, referente de la ONG Ampliando Derechos, en diálogo con Sí 98.9.

La dirigente lamentó que, en su fallo, la magistrada "pone en duda la violencia de género". Criticó: "Muchos identifican la violencia de género con violencia física y no psicológica, que no deja marcas pero perjudica muchísimo".

"Queremos dejar en claro que la causa siempre estuvo marcada por estereotipos y prejuicios de género. Lamentablemente, pasó esta causa por manos de mujeres encargadas de justicia, ha tenido fiscales y en el último caso una jueza", sostuvo Giacometto. "Notamos algo que sostenemos hace rato: sin perspectiva de género no encontramos que haya justicia posible para las mujeres", remató. 

Por su parte, en diálogo con otra emisora, la jueza Marisol Usandizaga (responsable del fallo) remarcó: "No entiendo por qué estigmatiza la aplicación de una pena". 

Admitió que en el expediente quedó registrado que la joven protagonizó un "parto avalancha", que se trató de un embarazo que había ocultado a su pareja y a sus padres, algo que ya había sucedido con su primera hija. Sostuvo que "cualquier persona que deja a su hijo recién nacido en un lavarropas, aún creyéndolo muerto, tiene un desorden psicológico, pero no permite la inimputabilidad".

Respecto de si la joven fue o no víctima de violencia de género, planteó: "Le pregunté si Yamila había tenido situaciones de abandono, vulnerabilidad social, si estaba aislada socialmente o si había sido víctima de violencia familiar, y la madre misma me lo negó".