El reconocido abogado Víctor Stinfale, acusado y detenido en las últimas horas como organizador de la fiesta electrónica Time Warp en la que murieron cinco jóvenes por ingerir drogas sintéticas, será representado legalmente por otro letrado tan mediático como el primero: Mariano Cúneo Libarona. 

Ni bien detuvieron a su colega y cliente, Cúneo Libarona encaró a la prensa y se movió como pez en el agua, o mejor dicho como mediático frente a las cámaras. "Él no va a este tipo de fiesta. No hay ningún email, llamado, ni una firma, ninguna intervención", aseguró el letrado, con cara de perro y cierta desfachatez ante la insistencia de los periodistas.

La noticia impactó por la reconocida carrera de Víctor Stinfale, ya que en su prontuario cuenta con clientes de renombre. Se podría decir que Diego Maradona tiene una cuenta corriente abierta en su estudio de abogados: lo defendió en infinidad de causas. Pero también representó a Pablo Migliore por encubrimiento del barra boquense Mauro Martín; a Moria Casán tras el confuso episodio de robo de joyas en el Paraguay; al famoso ladrón de blindados Luis “El Gordo” Valor y hasta a Carlos Telleldín implicado en la causa AMIA. Pero su ahora representante legal no se queda atrás.

Mariano Cúneo Libarona se recibió de abogado muy joven en una universidad privada con reconocimientos por su alto promedio, pero saltó a la fama en la década del 90, en la mediática causa del Jarrón de Coppola. Fue en 1996 que tomó la defensa de Guillermo Coppola, por entonces manager de Diego Maradona, quien quedó detenido luego de que la policía encontrara o plantara medio kilo de cocaína en un jarrón de su departamento. Ese asunto nunca quedó esclarecido del todo.

Finalmente, además de demostrar la inocencia de Coppola, culpó a los policías de haber armado la escena y dejó en offside al juez Hernán Bernasconi. La mediatización del caso fue inmediata de la mano de Mauro Viale, quien sentaba cada mediodía a personajes bizarros como Samantha Farjat y Natalia De Negri y más de una vez al abogado.

Más tarde se alejó de las causas mediáticas aunque no cedió en sus pretensiones. Por sus oficinas también pasaron a solicitar su defensa Amira Yoma; el barrabrava de River Plate, Alan Schlenker, acusado de instigar y planear el crimen del hincha Gonzalo Acro; y a Mario Segovia, el empresario rosarino conocido como el rey de la efedrina. También buscó en 2014 la presidencia de Racing Club.

También fue parte principal de la causa AMIA al ser defensor del ex comisario Juan José Ribelli, procesado como partícipe necesario en el ataque contra la sede de la mutual israelita. El juez Norberto Oyarbide lo hizo detener en 1997 al imputarle los delitos de coacción agravada y encubrimiento, en la causa que investigaba la sustracción de un video del despacho del juez Juan José Galeano. Allí puede verse al magistrado en un diálogo inusual con el detenido Carlos Alberto Telleldín, quien fue representado paradójicamente por Stinfale. 

Por estas horas buscará primero que se levante la detención de Stinfale y en caso de ser procesado su colega, liberarlo de cargos y culpas.