El Concejo municipal reactivará este miércoles la cajoneada y reclamada actualización de la Ordenanza Nº 7218 sobre nocturnidad, que data de 2001 quedó totalmente anticuada. El debate busca aggiornar las reglamentaciones a los nuevos usos y costumbres de boliches y bares, y sumar espacios culturales a la regulación que, entre otros asuntos como la crisis y la pandemia, están en peligro de extinción.

Los hábitos de la noche son dinámicos y siempre la regulación corre de atrás a los cambios de moda. La pandemia modificó absolutamente todo, pero el movimiento nocturno sigue estando pese a algunos cuestionamientos respecto a que "la noche rosarina murió".  

Hay cinco proyectos presentados sobre reforma o derogación de la ordenanza en cuestión que se empezarán a analizar en la comisión de Gobierno ampliada. Pertenecen a las edilas Daniela León, Silvana Teisa, Jésica Pellegrini, Lisandro Cavatorta, Julia Irigoitía y la presidenta del Concejo María Eugenia Schmuck, quien bregará por el interés del control nocturno que más cuadre al Palacio de los Leones.

Su propuesta, según pudo conocer Rosarioplus.com, "establece condiciones para habilitación, funcionamiento e inspección de actividades y espectáculos públicos en horario de 20 a 5 de la mañana".

La propuesta de la edila León, "crea código de espectáculos públicos". La de Teisa busca "crear licencia para bares o restaurantes con difusión musical y/o show en vivo". Desde Ciudad Futura, Pellegrini busca "establecer regulación de espectáculos públicos, actividades recreativas y nocturnidad", Cavatorta quiere "crear zonas de entretenimiento nocturno"", mientras Irigoitía buscará "el ordenamiento de la actividad y convivencia nocturna".

Proyectos para regular espacios culturales

Otros tres proyectos se comenzarán a pensar sobre espacios culturales, aunque aun se desconoce si estos se aplicarían dentro del avance de una nueva ordenanza de nocturnidad o si se pensará como ordenanza en paralelo.

Una propuesta establecería un "régimen de preservación y fomento para clubes sociales y culturales", de Fernanda Gigliani, Caren Tepp, María Eugenia Schmuck, y Marina Magnani.

Otra que busca "la creación del régimen de promoción para clubes sociales, culturales y deportivos amateurs", de Alejandro Roselló, Ana Laura Martínez, y Martín Rosúa. Y por último los "espacios de trabajo cultural independiente" de Horacio Correas.