Un tribunal compuesto por las juezas Alejandra Rodenas, Raquel Cosgaya y Hebe Marcogliese condenó este miércoles a un joven de 27 años a la pena de prisión perpetua por raptar, violar y asesinar a una chica de 14 años, en el verano de 2015, dentro de la casa que habitaba en Nuevo Alberdi.

La acusación corrió por cuenta del fiscal Miguel Moreno contra Juan José Pérez, considerado como el autor de la violación y asesinato de Milagros Sánchez, ocurrido el mediodía del 18 de febrero de aquel año, en una humilde vivienda semi rural de Grandoli y la calle 1300, cerca del canal Salvat. La niña había ido a realizar un mandado a casa de su abuela, pero en el trayecto se quedó hablando con Pérez, sobrino de un vecino de la zona que había llegado unas semanas antes al barrio. Luego se sabría que Pérez había cumplido antes una condena por otro abuso sexual.

Hubo testigos que vieron a Milagros conversando con Pérez en la puerta de la casa, y esa fue la última vez que la vieron con vida. Al día siguiente, Pérez desapareció del barrio, y el 20 regresó para llevarse sus pertenencias y volver a marcharse. Esa misma noche, el cadáver de la adolescente apareció envuelto en sábanas y frazadas, y atado con cables de teléfono. Estaba tirado a la vera del canal que atraviesa esa zona del noroeste rosarino, casi en el linde con Ibarlucea. 

El fiscal Moreno incriminó a Pérez de haberle dado muerte para ocultar un delito previo, el del secuestro y abuso sexual, lo que se denomina en la jerga jurídica como homicidio criminis causae en concurso real con rapto, en grado consumado y en calidad de autor. Por eso pidió una pena de prisión perpetua, y el tribunal de las juezas accedió al planteo fiscal.