El Banco Hipotecario deberá pagarle una millonaria cifra a un cliente que fue víctima de una estafa a través de la plataforma de la entidad como consecuencia de la vulnerabilidad de su sistema, sin recibir tampoco luego ayuda de parte de la misma.

Así lo determinó la jueza provincial Mónica Klebcar (del Juzgado de 1ª Instancia de Distrito en lo Civil y Comercial de la 2ª Nominación de Rosario), que condenó al banco a pagarle $1.211.892,87 más intereses y costas al hombre damnificado, que además es tesorero en otra entidad bancaria.

El fallo se da por entender que el banco es responsable del fraude sufrido por la víctima, primero por no poder garantizar la seguridad de sus canales electrónicos y luego por hacer caso omiso a las denuncias de su cliente para desconocer la operación fraudulenta.

El episodio se remonta a julio de 2021, cuando delincuentes vulneraron los canales electrónicos del banco y abrieron una caja de ahorro a nombre de la víctima, desde la cual tomaron un préstamo por 386 mil pesos que luego transfirieron a dos cuentas distintas.

Al enterarse del hecho, el hombre realizó al día siguiente la denuncia penal primero y luego la correspondiente ante el banco, desconociendo las operaciones y remarcando que él nunca reveló a nadie su número de usuario o clave.

Sin embargo, desde el banco argumentaron que no tuvieron responsabilidad alguna en "el supuesto fraude" y que no "se violó el deber de seguridad", sosteniendo que en este caso "medió culpa de la víctima" y que tampoco se podía declarar nulo o inexistente el préstamo porque se formalizó "con la firma electrónica del actor".

No obstante, en su fallo la jueza entendió que el banco nunca pudo comprobar la correcta seguridad e invulnerabilidad de su home banking, por lo que lo responsabilizó por el incidente ocurrido.

Además, se tuvo en cuenta también entre los argumentos que la víctima trabaja desde hace más de 20 años en otro banco, motivo por el cual no tenía razones para pedir un préstamo con la otra entidad bancaria, siendo que siempre operó con la de su empresa empleadora.

El vínculo entre el hombre y el Banco Hipotecario se remonta a que originalmente debió solicitar un préstamo en el mismo bajo las condiciones del Plan Procrear, pero que por fuera de ese crédito y la caja de ahorro abierta para tal fin, nunca realizó otro tipo de operaciones.

La jueza destacó además la falta de colaboración de parte de la entidad en la presentación de pruebas solicitadas, como así también lo hizo el cliente al marcar “el destrato” sufrido a partir del hecho.