La Secretaría de Control y Convivencia de la Municipalidad realizó siete clausuras el fin de semana, en el marco de las restricciones por la segunda ola de coronavirus, y registró un insólito episodio en un restaurante ubicado en 27 de Febrero y Entre Ríos, donde los inspectores encontraron comensales ocultos en los baños del local.

Los agentes municipales arribaron este domingo al mediodía al local gastronómico de zona sur como parte del control imperante, y allí verificaron que el comercio se encontraba en funcionamiento con actividad presencial, lo que implicó una violación a las restricciones que estableció el gobierno provincial.

Los inspectores detectaron movimientos inusuales de personas dentro del inmueble y así fue que al revisar otras dependencias constataron que en los baños del restaurante se encontraban atrincherados un grupo de comensales.

"Tuvimos que clausurar siete comercios, cuatro de ellos del rubro gastronómico por estar funcionando con comensales en su interior. Incluso, uno de los locales, estaba escondiendo a sus clientes en sus sanitarios", señaló la secretaria Carolina Labayru, en diálogo con el móvil de Sí 98.9.

Además de los bares, fueron multados con la inhabilitación por un tiempo determinado una cancha de fútbol 5, una barbería y una sala de ensayos.

"Tuvimos intervenciones en dos fiestas clandestinas: una en Alvarado al 1400 con 11 personas trasladadas a la comisaría 12, y otra en Avenida del Rosario al 1200, donde lograron escapar cerca de 40 jóvenes mientras el resto se encontraba agrediendo a los agentes de control", comentó la titular del área de control municipal y aclaró que dos trabajadores "sufrieron agresiones físicas" y fueron derivados al Heca para su atención. Por este hecho se detuvo a cuatro personas.