Se cumplieron tres años del asesinato a sangre fría del estudiante de Ingeniería en Sistemas en la UTN Juan Cruz Ibáñez en Zeballos al 2100, cuando un ladrón escaló desde la calle hasta una ventana del primer piso y lo atacó mientras dormía. 

La madre de Juan Cruz, Sonia Sanchi destacó en diálogo con Rosarioplus.com que a la familia le resulta “incomprensible cómo no se haya avanzado con la sentencia cuando el detenido se declaró único culpable, y ya pasaron tres años del hecho”.

Según recordó, el fiscal Guillermo Corbella les informa cada novedad de la causa, y ya se le realizaron al acusado dos peritajes psiquiátricos por “supuestos ataques de histeria”. En julio se realizaría otro examen similar, así como una nueva prórroga de su prisión preventiva. A los deudos les aseguran que el joven que se confesó homicida seguirá en esa condición hasta la sentencia. 

Los Ibáñez son oriundos de Murphy, la localidad de la que es oriundo el ministro de Seguridad, Jorge Lagna. Él les prometió que el acusado “no será puesto en libertad”. El asunto es que la familia no quiere “que tenga dos años por preventiva, sino que finalmente sea condenado a la pena más alta posible”, reclamó Sonia. La posibilidad de una excarcelación mortifica a la familia que está en duelo desde aquella fatal madrugada de 2018. 

El detenido asesinó a Juan Cruz cuando tenía 17 años, y a los pocos meses fue mayor de edad. Se encuentra detenido en la Unidad Penitenciaria N°11, de Piñero, a la espera del juicio oral que se dilata, "supuestamente por la pandemia, pero no entendemos qué pruebas les faltan a los jueces para condenarlo", dijo la madre de la víctima.

"Tenemos mucha bronca e impotencia porque no nos escuchan, piensan que con el tiempo dejaremos de reclamar su condena, porque no fue una muerte en un robo en la calle con forcejeo. Juan Cruz dormía en su casa cuando escaló y lo mató con saña", distinguió.

Sanchi recordó que hay un proyecto de ley que espera ser debatido para empoderar a víctimas de inseguridad, ya que "los familiares estamos desamparados, y cuando el hecho lo comete un menor es peor". No obstante, la modalidad actual del sistema penal en Santa Fe permite a los deudos constituirse como querellantes, con acceso y participación en la causa. 

Con un claro mensaje de pedido de justicia, la familia de Juan Cruz no deja de reclamar a través de sus redes sociales, donde se manifestaron muchos en adhesión.

Sonia Sanchi

El joven Juan Cruz Ibáñez fue asesinado a puñaladas en el interior del departamento en el que vivía, en el primer piso de Zeballos 2133, el 29 de junio de 2018. Por el hecho fue detenido un menor, quien estuvo a disposición del Juzgado de Menores hasta cumplir la mayoría de edad.

Juan Cruz intentó defenderse pero murió desangrado por las heridas sufridas. El homicida estuvo cuatro horas más en el departamento, se duchó y se vistió con ropas de la víctima. Cargó una notebook y otros bienes, e intentó marcharse con el auto de Juan Cruz. Pero no supo cómo sacarlo de la cochera, entonces se marchó en un taxi. Se hizo llevar hasta la villa de La Siberia y no le pagó al taxista, quien al otro día lo relacionó con la noticia del crimen, y denunció a la policía.

Una misa y un árbol por año

Los padres del joven asesinado, Daniel Ibáñez y Sonia Sanchi lo recuerdan cada año con misas en su memoria en el pueblo de Murphy, y este martes a las 17 harán una misa íntima en la Parroquia Santa Teresita del Niño Jesús, sólo ellos con el cura, por protocolo covid. "El año pasado fue por Zoom, y este año ya nos llamaron miles de amigos desde anoche, pero queremos hacerlo solos ya que ambos somos de riesgo y estamos recién vacunados, y acá aun hay muchos contagios", destacó Sonia.

Otra acción noble que realizan es cada 17 de agosto, cumpleaños del joven, plantan un árbol, como símbolo de vida y regalo al lugar que lo vio nacer y crecer. Para el próximo cumpleaños, si bajan los contagios, esperan pintar una estrella roja frente al departamento de Zeballos y Oroño para recordar a Juan Cruz en Rosario también. Y plantarán un Ombú en la plazoleta del ingreso al pueblo junto a la ruta.

La vida trunca de una joven promesa

El joven de 23 años asesinado hace tres años era estudiante de la Universidad Tecnológica Nacional de la carrera Ingeniería en Sistemas de la Información.

En 2016 Ibáñez ganó junto a su grupo un concurso realizado por la NASA cuando crearon un programa destinado a geolocalizar drones y evitar que se estrellen, y lo expusieron en un hackatón mundial de la agencia espacial estadounidense.