El Ministerio de Seguridad provincial desplegó de nuevo este viernes un procedimiento de derribo de inmuebles señalados como puntos de venta de drogas. Esta vez fue en tres construcciones situadas en el noroeste de la ciudad, entre los barrios El Churrasco y La Esperanza. Se trata de lugares apuntados desde hacía tiempo como búnkeres narco, y escenario además de cuatro asesinatos relacionados con esa economía ilegal. “Proceder al derribo de estos puestos de venta, gracias a la Ley de Microtráfico, es una forma de llevar tranquilidad a los vecinos”, destacó el ministro Pablo Cococcioni.

La topadora avanzó primero por una endeble casilla de material en Leonardo Favio y Pizzurno; luego derribó otra pieza en Cavia y Larrechea, y terminó en el más célebre y cruento de todos, Cavia y Ghiraldo

Las demoliciones se desarrollaron ante la mirada silente y distante del vecindario. Cococcioni definió la acción como "la inactivación coercitiva mediante el derrumbe, el primero de 3 en el día de hoy, que funcionaban como punto de venta de estupefacientes, pero además de eso son lugares importantes porque fueron el escenario y el contexto de cuatro homicidios ocurridos en un breve lapso en la zona de Cavia, casos en los que hay personas aprehendidas y continúa la investigación”.

Derribaron tres puntos de venta de drogas, escenarios de 4 asesinatos

Además, añadió que más allá de los homicidios consignados, estos lugares eran constante motivo de denuncias anónimas en llamados a la línea 911, con disturbios, disparos de arma de fuego y un clima latente de hostilidad que impregnaba tensión en la rutina de ambos barrios.

"Todo un fenómeno que le quita tranquilidad a los vecinos, de manera que una de las medidas que, sin perjuicio de profundizar la investigación penal que dirige la fiscalía, es proceder al derribo de estos puestos de venta”, fundamentó el funcionario.