El Tribunal Oral Federal Nº 2 integrado por Omar Paulucci, Ricardo Vasques y Mario Gambacorta, rechazó este miércoles el pedido de libertad presentado por la defensa de Diego Álvarez, ex jefe de la Comisaría 7ma. en la que se vio con vida por última vez a Franco Casco en octubre de 2014. El policía está acusado del delito de "desaparición forzada de persona seguida de muerte y ejercicio de tortura".

"La semana pasada las defensas y familiares de les policías que están siendo juzgados por la desaparición, torturas y muerte de Franco circularon información sobre un supuesto hallazgo de material audiovisual en el que se “vería” al joven el 8/10/14 deambulando por la ciudad", explicaron desde la Multisectorial Contra la Violencia Institucional.

Y continuaron: "En base a este supuesto hallazgo, la defensa de Álvarez había solicitado su inmediata libertad. Esta información forma parte de una estrategia agresiva, que falta a la verdad y que pretende, una vez más encubrir lo sucedido y garantizar la impunidad para les responsables por la desaparición y muerte del joven".

Sobre dichos videos, la Multisectorial detalló que se trata de "parte del material probatorio presente desde el comienzo de la causa y al que todas las partes han tenido acceso oportunamente" y que los propios padres del joven declararon en su momento que la persona que se observa en las grabaciones no coinciden con las características fisonómicas ni la indumentaria de Franco.

Este miércoles, el tribunal rechazó el pedido de la defensa de Álvarez por considerarlo "extemporáneo e improcedente" por lo que el agente seguirá preso mientras se desarrolla el juicio oral en el que están acusados ​​él y 18 policías más.

Tweet de Multisectorial Contra La Violencia Institucional

Los agentes están señalados de haber sufrido de la desaparición seguida de muerte del joven de 20 años que en 2014 llegó a Rosario para visitar a sus familiares y días después de haber estado detenido en la comisaría 7ma. encontró su cadáver en el río.

Álvarez está procesado junto a los oficiales Cecilia Contino, Walter Benítez y Fernando Blanco. En tanto,  Rocío Hernández, Marcelo Guerrero, Enrique Gianola Rocha, César Acosta, Guillermo Gysel, Cintia Greiner y Esteban Silva -también miembros de la misma seccional-, están acusados ​​de "desaparición forzada seguida de muerte".

A su vez, Rodolfo Murúa, Walter Ortiz, Romina Díaz, Ramón Juárez, Elisabeth Belkis y Franco Zorzoli se encuentran imputados como "participios secundarios" de la desaparición forzada seguida de muerte. Y dos agentes de Asuntos Internos, Pablo Síscaro y Daniel Escobar, están acusados ​​de "encubrimiento".