Al menos seis personas murieron apuñaladas y otras resultaron heridas, este sábado por la mañana, en un shopping de Sidney, Australia. 

El atacante se paseó por el centro comercial Westfield Bondi Junction, al este de Australia, amenazando a cualquier persona que se le cruzaba por el camino, hasta que una mujer policía lo enfrentó y lo mató de un disparo. 

"Seis personas fueron mortalmente apuñaladas y un hombre fue abatido", indicó la Policía de Nueva Gales del Sur en un comunicado. Cinco de ellas murieron en el acto, mientras que la restante falleció mientras era atendida en un hospital.

Anthony Cooke, comisario asistente local, contó a la prensa que el ataque fue llevado a cabo por un solo individuo, aunque informaciones previas hablaban de que los agentes buscaban a un segundo agresor.

“Nada que hayamos visto en la escena indicaría ningún motivo ni ideología”, apuntó el comisario que, al ser consultado sobre motivaciones terroristas, apuntó: “No estamos descartando nada”.

Una inspectora de Policía se enfrentó al agresor, quien la amenazó con un cuchillo en la mano por lo que la oficial le disparó con su arma, relató Cooke. La agente le realizó maniobras de reanimación al sospechoso mientras llegaba el personal médico, que no pudo reanimarlo.

Según los medios australianos, cientos de personas fueron evacuadas del centro comercial tras producirse el ataque, mientras que imágenes de redes sociales mostraban a la gente desesperada escapando corriendo del lugar mientras llegaban patrulleros y ambulancias.