El juez federal Carlos Vera Barros libró este miércoles una docena de allanamientos en Rosario, como parte de la investigación sobre el financista Yalil Azum y una organización dedicada a lavar dinero proveniente de negocios ilegales como la venta de estupefacientes, préstamos usurarios y el juego clandestino. Lo estridente es que entre los allanamientos ordenados, uno recayó en la sede del Club Atlético Echesortu, en el domicilio de uno de sus dirigentes, y en la sucursal Fisherton del Banco Francés.

Varios agentes de Gendarmería Nacional tomaron durante la mañana la reconocida institución rojiblanca de San Nicolás al 1300, frente a la plaza Buratovich. Tenían la misión de hallar pruebas de que allí funciona una mesa de dinero clandestina, parte de la actividad que controlaba Yalil Azum, detenido semanas atrás bajo acusación de lavar dinero proveniente de narcotráfico.

Del procedimiento participó también personal de la Afip y del Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (Inaes).

Causó estupor entre los concurrentes al club Echesortu, la mayoría ajenos al despliegue de uniformados que paralizaron la circulación de personas, incluido el comedor que está en el ingreso.

En una caja de seguridad del Banco Francés –contratada por un directivo del club Echesortu– se secuestraron 30 mil dólares, euros y joyas. 

Estos allanamientos son el desprendimiento federal de la causa por la que Azum está detenido. Fiscalía le comprobó vínculos con personajes violentos relacionados con la barrabrava de Newell's y la distribución de drogas. Azum, por el contrario, se movía en el ambiente financiero de Rosario y en los últimos cinco años había crecido exponencialmente en su patrimonio y en la envergadura de las inversiones que realizaba.