“Si el nuevo pedido de endeudamiento es el mismo que en diciembre, la respuesta seguirá siendo negativa”. Esa es la postura de la oposición que espera en las próximas semanas una reformulación profunda del mensaje del Ejecutivo municipal para tratar la toma de deuda en el mercado de capitales por 200 millones de dólares. Al parecer, desde el oficialismo tomaron nota y ahora sus operadores prefieren ceder en algunos puntos y no perder la principal carta a la que apuesta en un año electoral.

Lo cierto es que en diciembre pasado el Frente Progresista no logró generar los consensos necesarios, y sintió el revés político. Pero la propia intendenta Mónica Fein anunció que reenviará el pedido de endeudamiento con algunos retoques que podrían ser significativos. Se espera que esta semana en la apertura de sesiones ordinarias del Concejo haga mención al tema.

Por estas horas el equipo técnico de la Secretaría de Hacienda trabaja en modificaciones puntuales: se busca darle más volumen a lo destinado a obras de infraestructura y que la deuda potencial no sea colocada totalmente en el mercado internacional, es decir, que parte de esos compromisos se tomen en pesos y no sólo en dólares. Lo más resonante es que, además, se quiere reducir el porcentaje de lo destinado para cancelar deuda contraída en los '90.

El concejal socialista Horacio Ghirardi confirmó a Rosarioplus.com la intención del Ejecutivo. “Se le va a dar una vuelta de tuerca al tema de que tenga más peso el endeudamiento para obras que para otros objetivos, y seguramente se buscará alguna alternativa de financiamiento no sólo a nivel internacional sino en el mercado local para tomar en pesos”, dijo.

Según el proyecto enviado al Concejo, los 200 millones de dólares se asignarían a obras y bienes de capital (60%), reestructuración de pasivos (27%), capitalización del Banco Municipal de Rosario (10%) y modernización tecnológica (9%).

Lo que más discrepancias generó fue la asignación para reestructurar la deuda de corto plazo con proveedores que se arrastra de hace más de 15 años. Por eso el Ejecutivo está dispuesto a resignar parte de este punto. "Se intentará reducir el porcentaje, y si se encuentran alternativas, eliminarlo", afirmó Ghirardi.

"Esto no es una marcha atrás sino una reformulación. De acuerdo a lo que escuchamos de los bloques que no nos acompañaron el año pasado, quizás,  puedan cambiar de opinión”, se defendió.

La oposición, todo oídos

“Si el proyecto es el mismo que el anterior, nuestra postura será la misma, afirmó Osvaldo Miatello, concejal del bloque Compromiso por Rosario. “Hasta ahora no hay nada, ni oficial, ni extraoficial”, completó.

Por su parte el concejal radical, dentro aún del Frente Progresista, Martín Rosúa, comentó días atrás que “es atinado acompañar la toma de deuda si la totalidad de los montos obtenidos se destinan a obras de infraestructura, estableciendo un plan respecto al destino específico de cada obra, y que eso no se convierta en una negociación con los bloques del Concejo para su aprobación”.

“Más que un toma y daca, es necesario abordar con seriedad y responsabilidad este pedido. Sin partidismos y sin intereses mezquinos. Sin especulaciones electorales”, pidió el radical.