La directora del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, llegó el viernes a Argentina yreiteró su "apoyo" al plan económico del país tras reunirse con el mandatario Mauricio Macri, el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, y el presidente del Banco Central, Luis Caputo.

"Tuve una reunión muy productiva con el ministro Nicolás Dujovne. Reiteré el apoyo del FMI al plan de reformas de las autoridades argentinas", publicó en redes sociales Lagarde, antes de una cena con Macri y parte del gabinete.

La directora del FMI también expresó en Twitter que había sido "un placer" conocer a Caputo y que "tiene ganas de continuar el diálogo" iniciado con él. El jefe del Banco Central se desempeñaba como ministro Finanzas hasta la petición de ayuda hecha este año al FMI, pero tras firmar el acuerdo con el organismo el ministro de Hacienda absorbió su cartera.

Pero no todo fue color de rosa. Lo verdaderamente importante ocurrió puertas adentro, en la cena, donde Lagarde reiteró las preocupaciones del FMI que ya habían sido publicadas días atrás con la evaluación interna de la economía argentina. "Existe una preocupación vinculada a la habilidad del gobierno para construir el apoyo para las posibles medidas que necesitan ser aprobadas por el Congreso”, indica el documento.

Para asegurarse de que el gobierno cumplirá, por ejemplo, con los recortes necesarios para mantener el pacto, el FMI planea monitorear de cerca y analiza la reapertura de sus oficinas locales que fueran cerradas en 2012. 

A comienzos de mayo, el Gobierno argentino decidió recurrir al FMI en medio de una fuerte devaluación del peso y grandes tensiones en el mercado de deuda. Lagarde se encuentra en Buenos Aires para participar en la conferencia de ministros de Finanzas del G20, cuya presidencia temporal ostenta este año Argentina.