El proyecto de ley "ómnibus" enviado el pasado miércoles al Congreso por el Poder Ejecutivo en materia de educación superior establece que "las instituciones de gestión estatal y las universidades nacionales podrán establecer aranceles" para extranjeros no residentes. 

La iniciativa "Ley de Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos" modifica en el artículo 553 el artículo 2 bis de la ley 24.521 de Educación Superior que dice que "los estudios de grado en las instituciones de educación superior de gestión estatal son gratuitos e implican la prohibición de establecer sobre ellos cualquier tipo de gravamen, tasa, impuesto, arancel, o tarifa directos o indirectos". En su lugar, agrega que "las instituciones de educación superior de gestión estatal y las universidades nacionales en ejercicio de su autonomía, podrán establecer aranceles para los servicios de enseñanza de grado o de trayectos educativos para aquellos estudiantes que no reúnan los requisitos previstos en el párrafo primero". 

En diálogo con Rosarioplus.com la presidenta de la Federación Universitaria de Rosario, planteó su mirada acerca de lo que incuba esta posibilidad que abre la puerta para el arancelamiento de la universidad para extranjeros. Una posibilidad que la toca también en lo personal, ya que Flor del Alba Cruz, de 24 años, nació en República Dominicana y se naturalizó argentina hace ya varios años. Hoy es estudiante de la Facultad de Ciencia Política y Relaciones Internacionales de la UNR y militante de Franja Morada.

– ¿Qué opinión te merece la posibilidad de arancelamiento para extranjeros en la universidad?

– Flor del Alba Cruz: Desde el reformismo, que es nuestra corriente de pensamiento, sostenemos la negativa a cualquier barrera o restricción entre la sociedad y la Universidad. Basamos nuestro accionar en un horizonte de Universidad abierta, plural, para todos. Y cuando decimos todos hablamos desde un paraguas constitucional. En nuestra carta magna se plantea “asegurar los beneficios de la libertad, para nosotros, para nuestra posteridad, y para todos los hombres del mundo que quieran habitar en el suelo argentino”. Esto para nosotros eso es un mandato, una directriz en nuestro accionar de la cual no nos corremos ni un centímetro. En cuanto al proyecto de ley omnibus que recientemente envio el ejecutivo nacional al congreso, si bien hay que estudiar en fino a dónde apunta, el texto es toda una declaración de principios. Es a priori la visión del extranjero por fuera de ser ciudadano de derecho. Y aunque de a las universidades la posibilidad de elegir cobrar o no un arancel, entendemos que es un retroceso en materia de libertades y de ampliación de derecho, es llevar de a poco la discusión hacia un lugar con el cual no concordamos.

– Como nacida en Dominicana y naturalizada argentina ¿qué sentimientos te despiertan estas insinuaciones?

– FDAC: Argentina es un país de migrantes, un territorio que le permitió a muchas personas vivir de manera digna y empujar para adelante. Esa también es mi historia, criarme en un país solidario, lleno de esperanzas que me abrió sus puertas y me permite mediante un sistema público y de excelencia estudiar la carrera que me gusta y poder ser una de las pocas mujeres universitarias de mi familia. Como la mía, muchas historias que han sido transformadas por este gran país. No es la primera vez que por parte de alguien que pertenece al gobierno se piensan medidas a mi entender, restrictivas que no producen ningún cambio positivo, sin embargo, es novedoso que se busque su implementación. Es una forma más de negar las problemáticas que sí tenemos hoy en argentina y que merecen una atención más urgente. Que existan jóvenes que busquen educarse en este país y que durante ese proceso aporten a una mejor argentina, no es problemático.

– Planteas el aporte que realizar lo estudiantes extrangeros en su recorrido por la universidad, uno de los ejes de la discusión ¿A qué te referís vos con aportes?

– FDAC: Desde una perspectiva totalmente economicista, cualquier ciudadano, argentino, naturalizado o extranjero, provenga de donde provenga tiene la obligación de pagar sus impuestos en tiempo y forma en nuestro país, sumado a eso tenemos un impuesto general en nuestro país que es un impuesto al consumo, el IVA. La universidad argentina la pagamos entre todos, con cada compra, cada impuesto, cada transacción contribuimo a sostener el funcionamiento de, entre tantas otras cosas, la educación superior. Esa frase que hoy en día se repite incansablemente que dice que "los extranjeros vienen de otro país a robarnos los estudios a los argentinos’’, no sólo es una falacia, sino que es xenófoba y alienta una mirada del extrenjero como el enemigo. Dicho esto, también es cierto que deberían existir convenios de reciprocidad con los países, sobre todo del mercosur, para que los argentinos en el exterior, en nuestros países hermanos puedan acceder a los mismos derechos. Esto obedece a un criterio de justicia. Quid pro quo.

– ¿Y qué aporta el multiculturalismo a la universidad pública?

– FDAC: Nuestro país se ha hecho a imagen y semejanza de su inmigracion, mayoritariamente españoles e italianos, pero de ahí en adelante mucho del crisol de proveniencias presente en nuestro país es el que lo hace tan heterogéneo y rico en su diversidad. La multiculturalidad en un mundo tan globalizado nos hace ser ciudadanos del mundo, compartir experiencias, conocer y tener una actitud de apertura a lo no conocido, esa es la base del respeto por el prójimo. Son valores que inexorablemente están contenidos en nuestro ideario reformista. No por nada el manifiesto liminar de 1918 cuando empieza su referencia ‘’a los hombres libres de Sud América’’.

– Para cerrar, esto que detallás y que comentás también a título personal como la experiencia transformadora de transitar la universidad pública ¿Hubiera sido posible en Dominicana? 

– FDAC: En principio no. En muchos países de Latinoamérica acceder a las universidades es súper complejo, y mucho más que existan jóvenes que de forma desinteresada estén dispuestos a dedicar su tiempo a intentar que más personas lleguen a la universidad, porque es una experiencia transformadora y porque estamos más que convencidos que la educacion es una de las herramientas que por excelencia produce cambios positivos en cualquier lugar del mundo.