Transcurrida la sorpresa electoral que protagonizó La Libertad Avanza (LLA) en las primarias presidenciales, el resto de las fuerzas comienza a trazar estrategias para ampliar su electorado. Hay más de 12,5 millones de votantes que decidieron por fuera de las tres principales fuerzas y que ahora aparecen como el primer destinatario para quienes tienen que salir a buscar votos, particularmente para Juntos Por el Cambio (JXC) y Unión Por la Patria (UP). La incógnita es quién tiene más chances de atraer a ese universo.

El primer cálculo matemático indica que entre la fuerza más votada (LLA) y la que se ubicó en tercer lugar hay apenas 655.663 votos. Al cotejar la exigua diferencia y los votos que quedaron disponibles, el escenario pareciera absolutamente abierto entre los tres competidores. Pero al indagar en el comportamiento de esos 12,5 millones de electores cautivos, las chances de Juntos y de Unión, se van achicando.

Otras de las cuestiones a tener en cuenta para analizar las chances electorales de quienes completan el podio, es su desempeño en las últimas elecciones. Ambos perdieron más de 7 millones de votos entre la Paso 2019 y las del domingo pasado. Particularmente al peronismo, tanto en 2015 como en 2019 le costó sumar respaldo en las urnas entre la Paso y las generales.

A donde van a buscar

Los días posteriores al domingo 13, Javier Milei apareció de manera reiterada en distintos medios de comunicación para sostener e incluso profundizar su discurso con el objetivo de dirigirse a los desencantados con la dirigencia política.

Por su parte, el propio Sergio Massa salió a contrastar lo máximo posible con el ganador, apelando al temor de los dubitativos. Patricia Bullrich parece algo más incómoda en este contexto, ya que radicalizar o flexibilizar el discurso la pondría ante el riesgo de que los votos se le escapen hacia los libertarios o al peronismo.

Los tres candidatos a la Rosada saben que entre esos 12,5 millones de votantes hay un combo heterogéneo. El componente más importante es el ausentismo, ya que se trata de unas 10.474.831 personas que no pudieron o decidieron no ir a las urnas el domingo. Se trata de un multitudinario sector que no encontró atractivos en la oferta inicial.

Como segundo gran componente de ese electorado cautivo está el voto blanco. Hay 1.148.342 argentinos y argentinas que metieron el sobre vacío, y que de manera deliberada manifestaron su rechazo con las propuestas electorales. Quizás sea el grupo al que más intente interpelar el peronismo, en su intento por salir al cruce de las propuestas más ortodoxas que plantea Milei.

En tercer lugar aparece el voto “huérfano”, 725.067 electores que se inclinaron por algún candidato que no superó el umbral del 1,5%. Mientras que en cuarto lugar figuran 328.891 nulos o impugnados.

Pasando en limpio, son 12.667.131 sufragios que no optaron ni por LLA, JXC O UP. Los ausentes son el mayor componente de ese universo, y quienes probablemente terminen inclinando la balanza hacia un lado y hacia otro, más allá de los votos que puedan migrar de una fuerza hacia la otra entre las Paso y las generales.

El antecedente

A la hora de analizar una posible remontada en JXC o el PJ, el archivo más cercano indica que para el justicialismo fue difícil aumentar el volumen electoral entre una instancia y otra.

En el 2015 cayó del 38,6% sobre el total del electorado en la Paso al 37% en la general. Ya en 2019, lideró la primaria con un 47,7% y para las generales avanzó menos de un punto, al 48,2%, que le alcanzó para ganar la primera vuelta. 

Pero tanto para el justicialismo como para Juntos los números de la elección del domingo significan un claro mensaje de alerta, ya que entre los dos dejaron ir más de 7 millones de electores, que paradójicamente resultó similar a la cosecha que obtuvo Milei. 

En la primaria de 2019, el Frente de Todos (12 205 938) y Juntos Por el Cambio (8 121 689) sumaron 20.327.627 votos. Mientras que el domingo, JXC (6.698.029) Y UP (6.460.689) acumularon 13.158.718 sufragios. Esos 7.168.909 de diferencia representan un largo camino a recorrer para los dos de cara a octubre.