__tadevel:head__

El sector carrocero de la provincia de Santa Fe se encuentra en un estado delicado debido a la apertura de importaciones dispuesta por el gobierno y que está generando pérdida de competitividad en los actores de la economía local. El ingreso de los colectivos ya armados provenientes de Brasil choca contra la producción local de autopartes y pone en riesgo la capacidad de empleo del sector.

Dirigentes de la Unión Obrera Metalúrgica seccional Rosario se reunieron con los empresarios carroceros para analizar el sector que cuenta con siete plantas carroceras más las industrias pequeñas que se encargan de las autopartes, muy lejos del número que existía a principios de los ’90.

“Los empresarios nos expresaron su preocupación por la importación que viene de Brasil, y entendemos que esto generará desempleo si no frenamos”, explicó Antonio Donello, secretario general de la UOM Rosario. Según el dirigente antes “entraban sólo los chasis y ahora entran carrozados”.

Hay un dato que acercó el Ministerio de Producción de Santa Fe que merece una lectura fina: mientras bajó la importación de partes para armar carrocerías y autos tipo familiar en un 40 por ciento, aumentaron las importaciones del vehículo ya producido un 52 por ciento. Se sustituye, por ejemplo, el colectivo ya carrozado en lugar de utilizar piezas locales. Según trascendió desde el sector, se importaron más unidades en lo que va del año que en todo 2015 por amplia diferencia.

Es que Brasil tiene un sobre stock de producción, y luego de su devaluación y una inflación baja, quedó con mayor competitividad para exportar. “Lo que nos importa es producir, para desarrollar la economía local y el empleo, no sirve que baje la autoparte pero ingrese el vehículo entero ya hecho”, explicó Luis Contigiani, titular de la cartera de Producción.

Donello explica que las empresas de Brasil radicadas en Argentina “tienen subsidios y esos subsidios lo usan para importar el vehículo”.