La Federación de Trabajadores del Complejo Industrial Oleaginoso, Desmotadores de Algodón y Afines de la Argentina (FTCIODyARA) y el Sindicato de Obreros y Empleados Aceiteros (Soea) San Lorenzo, salieron en conjunto a cuestionar la intención de los gobernadores de Juntos por el Cambio de derogar la reforma del impuesto a las ganancias, que eliminó la cuarta categoría y eximió del pago a los trabajadores en relación de dependencia.

“El salario no es ganancia”, señalaron los gremios de los trabajadores aceiteros en un comunicado en el cual valoraron esta medida que fue "un reclamo permanente de un amplio arco de organizaciones sindicales”

“Ahora los gobernadores de Juntos por el Cambio, el mismo sector político que no votó la modificación del proyecto, reclaman la derogación de la ley argumentando que estarían siendo afectados los fondos que reciben en concepto de coparticipación e iniciaron acciones judiciales”, expresaron los gremios y señalaron que este reclamo que "va contra las y los asalariados” es “grave porque JxC es el mismo sector que se encuentra conformando un gobierno de coalición con La Libertad Avanza, que ya anuncia un ajuste con caída de la actividad económica, despidos masivos y mayor desigualdad".

“Los fondos de coparticipación para las provincias podrían incrementarse si aportaran más los grandes ganadores de los últimos años: el puñado de grandes empresarios que tuvieron ganancias extraordinarias con la fenomenal recuperación económica tras la pandemia, y que no fueron afectados ni por la guerra ni por la sequía”, concluyeron.

Los gremios alertaron sobre esta situación de cara a la próxima gestión que arrancará a partir del 10 de diciembre. Señalaron que pedidos de este tipo "demuestran que el ajuste va a caer sobre la clase trabajadora, que no solamente sufre la inflación que ya están anunciando, y la crisis, sino que también va a tener que pagar el ajuste fiscal con la retención de parte de su salario".

Por eso, tanto la Federación como Soea San Lorenzo reafirmaron que "la única manera de enfrentar la crisis económica es con salarios mínimos y vitales según su definición constitucional y legal que, al tiempo que garantizan una vida digna a los trabajadores, motoricen el mercado interno, generando producción y empleo".

También señalaron que "si insisten en intentar derogar la ley nos van a encontrar a los aceiteros en la puerta de cada una de las empresas porque hoy no es simplemente un impuesto, hoy es una ley y un derecho para los trabajadores, y la vamos a hacer respetar".

Bancarios en alerta

Por su parte, la conducción nacional de la Asociación Bancaria (AB) convocó a los trabajadores a estar en "alerta" ante la decisión de los Ejecutivos de algunas provincias como Mendoza y Corrientes, cuyos gobernadores "se presentaron ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación (CSJN) para reclamar la derogación de la Ley de Impuesto a las Ganancias", una medida que "benefició a miles de trabajadores", según resaltó.

El gremio expresó este viernes su "preocupación" ante "la decisión de algunas provincias como Mendoza y Corrientes, cuyos gobernadores se presentaron ante el máximo tribunal nacional para reclamar la derogación de la sancionada Ley de Impuesto a las Ganancias", según un comunicado firmado por los secretarios general y de Prensa del gremio, Sergio Palazzo y Claudio Bustelo.

"Esa norma benefició a miles de trabajadores de todo el país que tributaban el injusto impuesto. En el mismo sentido ya se expresaron los gobernadores electos de Entre Ríos y Chubut, Rogelio Frigerio e Ignacio Torres, quienes consideran que la ley atenta contra sus provincias porque afecta la coparticipación", sostuvo el documento gremial.

La Bancaria reseñó que la norma fue sancionada por el Poder Legislativo en septiembre último y determinó la eliminación de Ganancias para la cuarta categoría, lo que significó "un inmediato alivio con el decreto del Poder Ejecutivo y representó una mejora salarial para cada trabajador, que desde hace años tenía afectado los ingresos por el tributo".

"No es en el espacio de los trabajadores donde tienen que buscar el financiamiento que de forma aparente quiere negarles el Gobierno nacional electo. La Bancaria repudia a los gobernadores que en lugar de procurar recursos en los grandes empresarios que obtienen ganancias siderales se meten con el bolsillo de los trabajadores, es decir, siempre con el eslabón más débil y nunca con el debido coraje para enfrentar a los poderosos", enfatizó.

El gremio añadió que la nueva norma de Ganancias fue el resultado de "una lucha histórica concretada en logro luego de muchos años de reclamos", y señaló que el gremio siempre demandó a los distintos gobiernos de turno "la derogación de un impuesto injusto como muestra de coherencia y responsabilidad de la organización sindical desde el primer momento y con la misma e idéntica postura".

"La Bancaria militó, acompañó y festejó la aprobación de esa ley, luego de más de una década de clara distorsión del poder adquisitivo del salario en cada paritaria lograda. En los últimos meses el sueldo, los aumentos conquistados, los bonos y el pago por el Día del Bancario, entre otros, llegan de forma íntegra al bolsillo, y no serán resignados", afirmó.