El sector de la construcción se encuentra en un contexto de incertidumbre cambiaria y aumento constante de precios, lo que dificulta la fijación de precios de referencia en términos de materiales y presupuesto. En este escenario, las empresas constructoras en la provincia de Santa Fe enfrentan dificultades para cobrar certificados de obra impagos, con atrasos de hasta tres meses en el cobro de fondos provinciales. Por ello, demandan al gobierno provincial una solución que les permita hacer frente a sus compromisos financieros y mantener la continuidad de sus proyectos.

Miembros de la Cámara de la Construcción de Santa Fe mantuvieron una reunión con el ministro de Economía de la provincia, Walter Agosto. Se espera que este encuentro tenga relevancia en cuanto al desarrollo de la obra pública en Santa Fe y que se den próximos capítulos al respecto.

En este contexto, las constructoras expresaron su preocupación por la falta de pago de varios certificados de obra, lo que podría provocar una ralentización o incluso la paralización de las mismas. Este es uno de los principales reclamos del sector.

Desde la Cámara que representa a las empresas constructoras de Santa Fe se informó que en la reunión se discutieron los temas de los certificados impagos vencidos y la reprogramación de las obras a futuro.

El aumento de los costos, la fluctuación constante en la disponibilidad de los materiales necesarios para las obras, las dificultades logísticas y de abastecimiento, la imposibilidad de acceder a créditos debido a las tasas exorbitantes y los ajustes de precios irrisorios, generan una situación preocupante en el sector. 

“Existe la posibilidad de que la imposibilidad de llevar a cabo las acciones necesarias pueda provocar una paralización del sector, con sus consecuentes efectos en el empleo y la economía regional”, dijo una fuente del sector.

Por ello, la Cámara de la Construcción de Santa Fe elevó un pedido formal al Ministerio provincial de Infraestructura, Servicios Públicos y Hábitat a principios de mayo, planteando los problemas que afectan a las empresas asociadas encargadas de ejecutar obra pública en la provincia.

En el sector de la construcción, una de las mayores preocupaciones es el retraso en los pagos de los cheques que reciben las empresas constructoras. Según argumentan, al tratarse de cheques con vencimientos de 60 o 120 días, la inflación hace que el monto aumente un 25% durante ese período, lo que provoca que el total quede desactualizado al momento del pago. Además, muchas constructoras tienen hasta tres meses de certificados de obra impagos, lo que agrava aún más la situación.

La ley de obra pública indica que los pagos de los certificados deben efectuarse a los 60 días de presentados, sin embargo, en la Provincia se estaba realizando el pago a los 90 días, incluso había trabajos realizados en enero que aún no habían sido abonados. Este atraso se observa de manera generalizada en toda la obra pública de la provincia.

“Es fundamental que la obra pública no se detenga en nuestra provincia. Cuando asumimos, nos encontramos con una deuda de seis meses en certificados de obra impagos. Nos reunimos con las empresas y, aunque no eran deudas de nuestra gestión, eran deudas de la provincia y las abonamos”, afirmó a principios de este mes, la ministra de Infraestructura de la provincia de Santa Fe, Silvina Frana, y destacó que el gobierno provincial está llevando a cabo reuniones con las cámaras y empresas correspondientes.