El abogado Silvio Guillermo Martinero, quien este martes mató de un tiro a un inocente cuando disparó contra los supuestos ladrones que le quisieron robar un maletín, justificó sus disparos al asegurar que le pusieron un arma primero “en el cuello” y luego “en el pecho” y que le “gatillaron sin que saliera la bala”, informaron fuentes judiciales.

Al declarar por más de dos horas ante el juez de instrucción Luis Zelaya, el letrado también dijo que el asalto fue “en la vereda”, afuera de la entrada del edificio de San Martín 551 al que estaba por ingresar.

Voceros judiciales indicaron que Martinero explicó que el asalto en el que le arrebataron una mochila se dio cuando estaba caminando a la altura de un comercio y estaba por ingresar a aquel edificio donde tiene una oficina.

“Primero me pusieron un arma en el cuello y después sentí el arma en el pecho”, dijo Martinero ante el magistrado.

Según las fuentes judiciales consultadas por Télam, el abogado tirador también dijo que creía que el delincuente que lo encañonó había llegado a gatillarle pero sin que saliera la bala.

Ante ese cuadro, Martinero afirmó que estaba en juego su vida y entonces decidió extraer su pistola marca Glock calibre 40 y efectuar los disparos.

Ahora el juez Zelaya espera el resultado de las pericias balísticas y le tomará declaración testimonial a una serie de testigos que pueden llegar a aclarar las circunstancias de cómo fue el asalto y los posteriores disparos.

Zelaya quiere saber si los delincuentes estaban armados, si ellos llegaron a disparar alguna otra arma de fuego o si el único que tiró entre cinco y seis balazos fue Martinero con su Glock .40.

Una fuente de la investigación reveló a Télam que los detectives de la comisaría 1ra. de la Policía Federal que trabajan en el caso llevaron al despacho del juez en un CD a sobre cerrado el video de la cámara de seguridad del hall del edificio de San Martín 551 al que ingresaba el abogado asaltado y que pudo captar la secuencia del arrebato.

“Por lo que contaron los que ya lo vieron, el video podría complicar al abogado, ya que aparentemente sólo se advierte que el ladrón le saca la mochila sin que se le vea ningún arma, sale corriendo y detrás Martinero empieza a los balazos”, dijo a Télam un jefe policial.

El penalista, vinculado a "cuevas financieras” y además mencionado en causas resonantes como el triple crimen de General Rodríguez -por haber sido abogado de Sebastián Forza-, y la mafia de los medicamentos, por el momento permanecerá detenido.

Su defensor, el abogado Rombolá, todavía no había presentado ningún pedido de excarcelación.
Si bien la carátula recién se definirá en caso de que el juez lo procese, según fuentes judiciales, Zelaya evalúa imputarle a Martinero el delito de homicidio simple con dolo eventual.

El magistrado entiende que ayer, al disparar su pistola Glock calibre .40 de la forma en la que lo hizo en plena calle San Martín al 500 contra los dos ladrones que huyeron en moto con su bolso, debió representarse la posibilidad de balear a un inocente, como ocurrió con el cerrajero De Negri, y no hizo nada para evitarlo.

Con esta calificación, en el caso de que en un futuro juicio oral sea considerado culpable, Martinero podría ser condenado a una pena de entre 8 y 25 años de prisión.

El juez también le imputará una portación ilegal de arma de fuego, ya que sus credenciales como legítimo usuario y portador de armas de fuego están vencidas desde 2012, confiaron voceros judiciales.
Martinero pasó la noche alojado en la alcaidía del subsuelo del Palacio de Tribunales, la Unidad 28 del Servicio Penitenciario Federal (SPF), a las 10.30 ya se encontraba en el juzgado realizando la entrevista previa con su defensor y al mediodía se inició la indagatoria que duró unas dos horas.