Los trabajadores de la rama lácteos del Sindicato de Choferes de Camiones (Sichoca), que lideran Hugo y Pablo Moyano, ratificaron este jueves "la huelga general nacional" en la totalidad de las plantas de la empresa cooperativa Sancor, en demanda de "su inmediata reactivación y la preservación de la totalidad de las fuentes de trabajo".

Luego de que fracasara una nueva audiencia de partes en la sede laboral de la Avenida Callao al 100, Moyano (h) -secretario nacional adjunto de Camioneros- ratificó la huelga general de la rama lácteos en todo el país y adelantó que la semana próxima el gremio realizará "una movilización y acampe en la Plaza de Mayo".

"La movilización y acampe se realizarán la semana próxima de forma sorpresiva para evitar que el gobierno conozca de antemano la fecha y ordene a las fuerzas de seguridad cercar el lugar", dijo.

El gremialista encabezará desde las 8 de mañana en la planta que Sancor tiene sobre la Panamericana "una masiva asamblea general de trabajadores de la rama lácteos" para decidir "acciones".

Moyano (h), quien fue acompañado en la audiencia por el secretario Gremial e Interior del sindicato, Marcelo Aparicio, comparó la situación de Sancor con la que en su momento atravesó la avícola Cresta Roja, en "la que quedaron finalmente en la calle mil trabajadores", señaló, y sostuvo que los camioneros -a diferencia de los lecheros enrolados en Atilra- continuarán la huelga. 

"Mientras existe la posibilidad de miles de despidos, el gobierno está preocupado por determinar quién se vistió mejor hoy en Estados Unidos: si la mujer de Donald Trump o la de Mauricio Macri. En tanto, los trabajadores de SanCor no cobran desde hace dos meses, no cumplen tareas y ya comenzaron los despidos", dijo.

Moyano (h) puntualizó que "el gobierno no quiere ayudar a la cooperativa, pero sí condonó la deuda del Correo Argentino y la de sus amigos y concedió a sus parientes la obra pública".

De paro en Gálvez

Los empleados de la planta de Gálvez iniciaron este jueves un paro por tiempo indeterminado en demanda de "soluciones" a "la crisis" que afecta a la cooperativa láctea y en demanda de "la reactivación de la totalidad de las plantas y la defensa de los puestos de empleo".

El personal decidió la huelga luego de deliberar en asamblea general, aunque la protesta se aplica "fuera del ámbito de la planta" para "no ser acusado de sabotaje ni nada por el estilo", aclararon los representantes del cuerpo de delegados.

"Hay gente trabajando en dos sectores y, si queremos cuidar la planta, hay que dejar todo en orden y limpio. El paro se realiza fuera del ámbito del establecimiento para no ser acusados de sabotaje y nada por el estilo", aseveró el delegado Eduardo Pitón.