Las autoridades de la Unidad Fiscal de Investigaciones abocada a la causa Amia le pidieron a Interpol que averigüe el paradero del ex jefe de Operaciones de la Secretaría de Inteligencia, Antonio Jaime Stiuso, con el objetivo de que sea traído a la Argentina para que explique en qué consistió su colaboración con el fallecido fiscal Alberto Nisman, en el marco de la investigación del atentado contra la mutual israelita ocurrido en 1994.

El pedido fue realizado a través de la Policía Federal, fuerza a la que los fiscales habían recurrido la semana pasada, cuando Stiuso no se presentó en la Unidad Fiscal especial para rendir cuentas sobre su relación con el fiscal que apareció muerto el 18 de enero.

“Encomiéndese a la Policía Federal Argentina la averiguación de su actual paradero y, una vez hallado, su traslado por intermedio de la fuerza pública a la sede de esta Unidad Fiscal”, decía la orden.

La misma citación había sido realizada antes por Oscar Parrilli y Juan Martín Mena, máximas autoridades de la Agencia Federal de Inteligencia, quienes encontraron intercambios inconclusos entre Nisman y Stiuso, al desclasificar los archivos de inteligencia relacionados con el atentado.

Stiuso no se presentó ante ninguna de las dos convocatorias: en la primera fue su abogado, Santiago Blanco Bermúdez, quien se apersonó en la central de inteligencia para notificar que su defendido se encontraba fuera del país; mientras que ayer dio la misma respuesta pero a través de una agencia de noticias internacional.