Los concejales Roberto Sukerman y Norma López denunciaron que vecinos de Avellaneda Oeste, adjudicatarios del loteo del programa provincial Mi tierra Mi casa, fueron “estafados” por el gobierno provincial, ya que si bien obtuvieron un terreno con la ayuda de la provincia, no pudieron acceder a un crédito del Banco Municipal para la construcción de sus casas. Sin embargo, desde la Secretaría de Estado del Hábitat, aseguraron que el plan sólo se comprometía a beneficiar a los ciudadanos en la compra del terreno, no en la construcción.

“La provincia operó con desprecio hacia los trabajadores que con tanto esfuerzo compraron sus terrenos, a quienes ni siquiera les garantizan la posibilidad de construcción de viviendas y la seguridad en la zona. El socialismo actuó con una lógica empresarial al peor estilo de los loteadores truchos”, lamentaron los ediles.

En comunicación con Rosarioplus.com, el precandidato a intendente por el Frente Justicialista para la Victoria Roberto Sukerman afirmó que pedirá explicaciones sobre este tema al Banco Municipal y los responsables provinciales del plan.

Según indicó el edil, en Avellaneda Oeste alrededor de 100 familias compraron sus terrenos en valores cercanos a los 50 mil pesos y ahora se encuentran con que el gobierno provincial les vendió la tierra pero el Banco Municipal no les financia el préstamo para la construcción. “¿Para qué le das un crédito si sabés que no pueden construir?”, planteó Sukerman.

Además, la concejala Norma López explicó: “A estos adjudicatarios, que hoy sólo tienen la espalda del Estado provincial, les exigieron un anticipo del 25%, el cercamiento del terreno y la construcción de cada vivienda antes del año de adjudicación. Pero se encontraron sin servicios y nadie les brindó las garantías necesarias para el acceso al crédito, como si fueran inversores inmobiliarios y no trabajadores que con esfuerzo sueñan con poder tener su casa propia. Una vergüenza”.

Desde la Secretaría de Estado del Hábitat explicaron a Rosarioplus.com que el plan Mi tierra Mi casa sólo les aseguraba a los beneficiados la adquisición del terreno a través de un plan de pago en cuotas que se le abonará al gobierno provincial. “Los adjudicatarios sabían que el convenio era sólo para la compra del terreno. En la folletería entregada se informaba sobre esto. Los trabajadores accedieron a terrenos de 200 metros cuadrados por un monto de 40 mil pesos, algo muy accesible”, afirmaron desde la secretaría y señalaron que hace algunas semanas mantuvieron conversaciones con los vecinos por la problemática denunciada. En cuanto al convenio con el Banco Municipal, el gobierno provincial destinó fondos para que la entidad bancaria entregue los préstamos para la construcción de viviendas. Los requisitos para acceder a dichos beneficios son establecidos por la institución financiera.

A pesar de las aclaraciones, en el sitio web oficial del gobierno de Santa Fe el texto promocional no aporta tanta luz, ya que se plantea que el plan “procura disponer de una amplia oferta de lotes con servicios básicos que puedan ser asignados a la población mediante sorteo público, para luego incorporarlos a diferentes modalidades de acceso a financiamiento y construcción de vivienda individual o colectiva”.