Finalmente este viernes el gobierno nacional habilitó la actividad de bares y restaurantes en todo el territorio santafesino. El sector gastronómico es uno de los más golpeados por la pandemia y podrá reabrir a partir del 8 de junio, de 7 a 23, tomando los recaudos necesarios ya conocidos. 

Si bien en las próximas días se afinará el protocolo sanitario, el gobierno nacional estableció tres requisitos básicos: 

a) con modalidad de reserva previa, garantizando el debido distanciamiento social entre los comensales, los que deberán concurrir por sus propios medios, pudiendo ocuparse simultáneamente hasta un máximo del 50% de la capacidad de los locales.

b) arbitrando medidas para desinfectar el calzado de los asistentes; y la limpieza y desinfección de las superficies y objetos de uso frecuente, antes de la apertura, periódicamente durante el horario en el que las instalaciones permanezcan abiertas y al cierre.

c) uso obligatorio de manera correcta por parte del personal del establecimiento de los elementos de protección que cubran nariz, boca y mentón.

Se prevé que no más de cinco personas por mesa y en lo posible al aire libre. Además se confirma el requerimiento de datos para la trazabilidad del contagio. El gobernador Omar Perotti dijo que es "fundamental que tengamos un registro de los clientes, es un dato clave para el seguimiento de cualquier instancia de contagios". 

Precios

Carlos Mellano, dirigente de la Asociación Hotelero Gastronómica de Rosario (AEHGAR) adelantó que se presentará una carta de invierno, ya no de verano como cuando se paralizó la actividad. Por ende se espera un aumento de la carta en algunos productos de entre un 10 y 15%. Carnes, café, y gaseosas tuvieron aumentos por lo que se trasladarán.