"The Dark Side of The Wall", la obra que reinterpreta el clásico filme y disco "The Wall", de Pink Floyd, se adaptó a la pandemia con un show que se podrá ver en streaming este sábado, a las 21, a través de blueteamshow.com.

El proyecto, que fue fue ideado por Gastón Guillén, cuenta con la voz de PJ Olsson (Alan Parsons Live Project), la musicalización de la London Eye y la dirección artística de Cristian Hansen.

"Estamos acostumbrados a presentar los shows en vivo con el revuelo de personas tomando sus lugares antes de comenzar, los aplausos y la adrenalina que cada show genera. Y lo raro es que esta vez, lo vemos y disfrutamos sentados en casa en vez de estar sobre y detrás de escena. Me atrevería a describirlo como una mezcla extraña de placer por lo logrado y, a su vez, curiosidad por saber cuál será la reacción de nuestro público", dijo Hansen a Télam.

El filme dirigido por Alan Parker se editó en 1982, tres años después de la salida del disco doble del grupo londinense, y retrata la vida de una estrella ficticia de rock llamado "Pink" y de cómo su madre abusiva genera cada vez más inestabilidad emocional en él hasta llegar a un punto en el que ya no puede relacionarse con otros, lo que provoca que el personaje fabrique un muro mental, detrás del cual se siente seguro.

La obra teatral y musical cuenta con una producción con actores, coros, animaciones 3D, 120 músicos en escena y una producción con nueve cámaras y 108 canales de audio.

—¿Cuáles fueron los desafíos para esta producción?
—Tienen que ver más con las posibilidades tecnológicas en cada hogar donde se recibe la transmisión y la capacidad y calidad de la fuente emisora/ repetidora en los horarios de la función. También está la competencia que generan las plataformas de streaming de películas de primer nivel con precios muy convenientes. Sin embargo, en cuanto a nuestra propuesta, es única.

—¿Tuvieron que readaptar la obra?
—La obra siempre se pensó tal como la presentamos. Multimediática y apelando a generar emociones y reacciones fuertes. Movilizante. Con actores interpretando la historia, pantallas LED mostrando lo que ocurría sobre el escenario y estructuras, mientras se proyectaban imágenes 3D, tocaba la banda London Eye, se acoplaba la orquesta y cantaba el coro. Y siempre estuvo la idea de filmar a varias cámaras y grabar en multipista para luego tener un producto de óptima calidad para poder compartir como lo estamos haciendo en esta presentación. Parece un poco mucho lo que digo, pero eso es lo que ocurría en los encuentros con Gastón Guillén, quien es el motor principal detrás de este espectáculo. Cada reunión que celebrábamos, debíamos potenciar el espectáculo y llevarlo un escalón más arriba mientras disfrutábamos del proceso creativo.

—¿Qué fue lo que te motivó, en 2017, a ingresar a la dirección de la obra?
—Yo ya había trabajado con Gastón y Gustavo Guillén, a quienes conozco desde hace más de 30 años, y cuando Gastón me propuso sumarme como coautor y en la Dirección Artística, accedí de inmediato. Confieso: este desafío increíble me tenía despierto por las noches de tanta adrenalina que corría por mi cuerpo.

—¿Con tus conocimientos musicales, participás de los arreglos?
—Soy músico, puedo opinar sobre la música, pero en un proyecto de esta magnitud, se necesitan los especialistas más apropiados para cada tarea, y aquí es donde entra Jorge Rosso, nuestro director musical y responsable de armar todos los arreglos de orquesta y coros. Estoy orgulloso de haber compartido este proyecto con él.

—Con respecto a la historia, ¿qué creés que sigue vigente hoy, luego de 40 años?
—El drama humano de crecer, equivocarse y aprender o no de nuestros errores, es un tema que, mientras exista la humanidad, siempre tendrá vigencia. Porque los seres humanos somos Imperfectos y susceptibles a errar. Y es justamente este punto (si aprendemos o no del error), y visto desde los ojos críticos y subjetivos de la madre de "Pink" donde se establece el conflicto que planteamos en el show.

—¿Qué rol ocupan tanto el disco como la película en la cultura pop o general?
—Ambas obras de arte tienen y tendrán un lugar destacado en la historia del rock. Por ser ambos trabajos unas genialidades. Cuando una banda decide contar una historia tan humana, de manera detallada, a través de tanta música y tantas imágenes, con un significado y simbolismo profundo, y a la vez crudo, se está frente a una obra que impactará profundamente en quien escuche la música o vea la película en cualquier época.

—¿Ves hoy grupos que piensen obras con semejante nivel de conceptualización?
—Creo que, como sociedad, estamos atravesando una etapa en la cual se blanquean y tratan temas que antes se consideraban tabú y que esto mismo genera más propuestas originales y "humanas". En lo personal, admiro mucho los logros maravillosos de Cirque du Soleil, Fuerza Bruta y De la Guarda como compañías que deciden "romper" con lo establecido y proponer historias atrapantes que "golpean" todos los sentidos.