“Siempre digo que el deporte me salvó la vida”, con esa frase el candidato a intendente justicialista por la lista Sumar, Roberto Sukerman, dice muchas cosas. En charla con Rosarioplus.com, el actual concejal reveló lo fundamental del deporte en su vida, cómo lo ayudó a superar obstáculos y a forjar su personalidad, al tiempo que reivindicó el uso de la bicicleta como medio para movilizarse por la ciudad, contra todo prejuicio.

“Hice varios deportes de chico pero a los ocho empecé a jugar al tenis y lo hice durante diez años. Al jugar con una mano, obviamente daba mucha ventaja. Sin embargo, competía siempre con chicos sin ninguna discapacidad. Eso forjó mi personalidad, me ayudó a superar desafíos, a no sentirme menos que nadie y a generar un gran amor propio”, relató el edil.

Sukerman contó que a los 18 debió abandonar el tenis por problemas en el brazo. Sin embargo, quedarse quieto no fue una opción y tras tomar impulso comenzó a correr maratones y luego triatlones, una actividad que sigue llevando adelante hasta el día de hoy.  “Es algo que me encanta porque se nadar en aguas abiertas y me permite disfrutar del río”, acotó.

En este sentido, reafirmó que si bien el deporte es fundamental para cualquier persona, lo es aún más para alguien con discapacidad”.

Este abogado constitucionalista que aspira a gobernar desde el Palacio de los Leones dvirtió que “el tema del deporte y la discapacidad la Municipalidad ni lo trabajó”, y fundamentó: “En las más de treinta colonias municipales que hay no encontrás personas con discapacidad, y las pocas que van tienen alguna discapacidad intelectual pero no física, lo cual habla de una gran deficiencia”. 

Por otro lado, el candidato a intendente reveló una curiosa cábala previo a cada jornada electoral. Es que según contó, aprovecha la veda electoral, donde nadie puede hacer campaña, para viajar a Arroyo Seco y nadar con Los Tiburones, algo que disfruta mucho y repite siempre. 

La bici, gran aliada

Todos los días, el edil sale a recorrer los barrios de la ciudad con su bicicleta adaptada, algo que según asegura, logró “derribando prejuicios”. “Al principio pensaba en lo que iban a decir de un tipo que va a dar clases o llega a las oficinas públicas en traje y bicicleta. Por eso solo la usaba solo para entrenar. Pero después decidió empezar a movilizarme con ella”.

En tanto, explica que su postura crítica hacia la política de movilidad que lleva adelante el municipio se sustenta en haber estudiado el uso de este medio de transporte en distintas ciudades del mundo que tuvo la oportunidad de conocer. “Lamentablemente la Municipalidad se cree que hacer una bicisenda es pintar la calle cuando en realidad es mucho más que eso. Hace falta una infraestructura mayor”, agregó.

En este sentido, expresó su acuerdo con el sistema de bicicletas públicas al tiempo que señaló que “hay mucho más para hacer en relación a su uso y a la seguridad general y la vial porque eso es algo que no se trabaja”. “Rosario es una ciudad espectacular para andar en bicicleta, por las distancias, porque es una ciudad llana”, agregó.

Asimismo, Sukerman remarcó la importancia de “apuntar a una movilidad más sustentable”, ya que de otra manera asegura que “no vamos a poder mejorar la salud de la población ni disminuir la contaminación”. “Si seguimos quemando combustible como lo hacemos la ciudad va a terminar siendo inhabitable”, sentenció.