Sí, se puede. ¿Por qué no? Una de las grandes preocupaciones en la previa de las fiestas es no engordar para después llegar en buena forma a la pileta del club y aunque suene imposible hay una serie de tips que se deben tener en cuenta para evitar subir de peso mientras se espera a Papá Noel.

La comida, la bebida y el descanso, son algunos de los puntos donde hay que poner el ojo para evitar sorpresas. Se puede comer y tomar, pero hay que medirse.

Las porciones

El aspecto visual es muy importante por lo que, para reducir la cantidad de comida hay que utilizar platos pequeños y comenzar por la ensalada o alguna verdura.

No hacer dieta previa

Aunque mucha gente piensa que es mejor bajar de peso para tener un margen durante las navidades, estos cambios no son buenos ya que pueden afectar al metabolismo y dejar marcas en la piel como las estrías. En este sentido, lo ideal para mantener tu peso es comer con medida y aumentar el ejercicio con el fin de quemar las calorías extra que se consumen.

Deporte durante el año

Se debe hacer ejercicio durante todo el año y no solo durante el periodo navideño, ya que es la regularidad lo que trae más beneficios, para tonificar músculos, fortalecer huesos, mejorar el humor y el sueño, acelerar el metabolismo y quemar grasa.

Alimentación saludable

Las comidas y cenas con amigos y familiares durante la Navidad se asocian a excesos culinarios. Sin embargo, es posible seguir una dieta equilibrada durante estas fechas por lo que recomienda "alimentos ricos en fibra, con alta densidad de nutrientes y pocas calorías".

Reducir el alcohol

Limitar la ingesta de bebidas alcohólicas durante las fiestas navideñas es primordial para no aumentar de peso. Lo ideal es tomar un vaso de agua entre cada copa.

Cuidado con los postres

Los postres contienen altas cantidades de azúcar refinado y grasas saturadas, y hay que cuidarse en todos los sentidos, comiendo de todo con moderación.

Importancia del descanso

Dormir unas ocho horas diarias es fundamental para que "se activen mecanismos que regulan el apetito y la sensación de saciedad.