Con los objetivos de concientizar, prevenir y tomar acciones concretas para poder erradicar la violencia obstétrica, este viernes se inauguró el Observatorio de Violencia Obstétrica Regional Rosario. Se trata de un tipo de violencia de género invisibilizada que ejercen los profesionales de salud sobre las mujeres y personas gestantes.

En diálogo con Rosarioplus.com, Julia López Barraza, miembro de Ovo Rosario, contó cómo surgió el proyecto, cuales son su principales premisas, cuál es la situación legislativa en Santa Fe, de qué manera se aborda la problemática desde la salud pública local y argumentó sobre la importancia del trabajo de las parteras, entre otras cuestiones.

Según reveló Barraza, la iniciativa surge de “Las Casildas”, una agrupación feminista de Buenos Aires fundada en 2011 por Julieta Saulo e integrada por personas de distintas disciplinas que, además de abordar la temática de la violencia obstétrica, incluye los derechos sexuales y reproductivos y cuestiones de género.

“En febrero nos empezamos a reunir un grupo de seis mujeres que ya veníamos trabajando sobre la temática en distintas disciplinas. Teníamos muchas ganas pero no sabíamos cómo lo íbamos a hacer”, reveló y explicó que la idea es comenzar a realizar “rondas de relatos” abiertas a la comunidad a partir del mes de junio.

“Queremos escuchar a las mujeres e informarlas con avales científicos sobre lo que es nuestra fisiología y también dar a conocer cuáles son nuestros derechos y los de nuestros bebés a la hora de parir y nacer. Además, nos proponemos tender redes entre los distintos sectores”, agregó al respecto.

“Rosario viene haciendo un trabajo muy importante en los efectores de salud, tanto en el Hospital Roque Sáenz Peña con sus modificaciones edilicias como en la Maternidad Martin con respecto a la formación del profesional”, explicó Barraza.

Asimismo, señaló que “a diferencia de otras ciudades, Rosario no cuenta con equipos de licenciadas obstétricas (más conocidas como ‘parteras’), que son aquellas que están realmente capacitadas para asistir en un embarazo saludable porque tiene una formación acorde a la fisiología normal, sin ninguna intervención médica”. 

En este sentido, cabe señalar que en Argentina existe la Ley 25.929 de parto respetado que fue sancionada el 25 de agosto de 2004 y reglamentada recién en 2015, once años después. En el año 2017 adhiere Santa Fe, sin embargo aún no se encuentra reglamentada. 

“Las mujeres tenemos derecho a ser informadas sobre las distintas intervenciones médicas que ocurren antes, durante y después del parto, a participar activamente en la toma de decisiones sobre las alternativas existentes (como por ejemplo, elegir quién las acompañará durante el proceso) y a ser informadas sobre la evolución del trabajo parto”, detalló la joven activista.

Por otro lado, se refirió a la posibilidad de exigir una cesárea respetada: “Si la mujer elige esta opción, debe saber que es bueno que empiece sola el trabajo de parto. En tanto, agregó que “la violencia obstétrica también avanza sobre los niños”, y advirtió que “medir y pesar al bebé apenas nacen no es necesario porque lo único que necesita de inmediato es el cuerpo de su mamá”.

Flavia Lamas, Ileana Lopez Barraza, Natalia Martí García, Marianela Menelli y Leila Rubio son las otras cinco mujeres integrantes de OVO Rosario. La presentación que tuvo lugar en el Concejo se dio en el marco de la Semana mundial del parto y nacimiento respetado. En tanto, a las 18.30 se proyectará la película PARIR de Florencia Mujica n la Facultad de Ciencias Médicas de Rosario.