En la misma semana que se conoció que la gastronomía volvería a funcionar nuevamente por la noche durante este fin de semana, se conoció que la ocupación de camas en el sistema de salud es casi total. Ante esto el Hospital Provincial compró camillas para aumentar la cantidad de lugares de internación en el nosocomio.

“Son dos realidades paralelas, la que vive un sector de la sociedad sin comprometerse, de forma irresponsable, y la tensión en el hospital que es importante”, afirmó la directora del Provincial Teresita Ghío en torno a las muy opuestas realidades en la ciudad, en diálogo con Rodrigo Miró en Radio Universidad este sábado.

Como la demanda es muy alta, confirmó que "se compraron 16 camillas que se distribuyeron en los sectores de internación por si sigue el desborde. Son camillas cómodas, con barandas y con espacio para colocar un suero, y ocupan mucho menos lugar que una cama común".

La búsqueda de agregar más plazas es, como explicó Ghio, "para no tener que recurrir al protocolo que desde el año pasado existe por esta pandemia, al que debemos acudir si no hay más lugares de internación para saber cómo seleccionar, lo que es una decisión muy dura y deja una cicatriz muy grande. Por eso hacemos todo para sumar mas cantidad de camillas, que ocupan menos espacio que las camas".

Por la agresividad del virus, aseguró que "la cosa viene más complicada que la primera ola, y se retomó la lectura de ese protocolo aunque no hemos necesitado ponerlo en practica hasta el momento".