El gobernador Omar Perotti recibió este martes por la mañana al intendente Pablo Javkin en la sede rosarina de la Gobernación provincial para definir el escenario a seguir ante la suba de contagios covid y la altístima ocupación de camas críticas, que había alcanzado en la noche del domingo a un 93 por ciento. 

Cuando el titular del Palacio de los Leones llegó al edificio, se sorprendió con un dato. Además del mandatario provincial, estaba Sonia Martorano. Inmediatamente, Javkin convocó a Caruana, que estaba a esa hora en el CEMAR. La reunión se hizo en el Salón Rodolfo Walsh, en el que suelen convocarse las conferencias de prensa. Pero esta vez, al final del encuentro, no hubo presencia de los medios. "Es que no podíamos llevar las cámaras de la televisión, cuando no estaban definidos los anuncios todavía. Eso se termina de pulir en las próximas horas", indicó una fuente presente en la reunión.

La primera definición, importante, fue política. Evitar en la provincia la foto que se da en Buenos Aires, con el enfrentamiento entre Juntos por el Cambio y el Frente de Todos por las restricciones. Aquí, tal como se hizo en 2020, el acuerdo entre Perotti y Javkin es que se mantendrá el escenario de medidas consensuadas. En esta línea, luego del último anuncio presidencial, se unificó el discurso de mantener la presencialidad y la actividad económica, "mientras se monitorea día a día la ocupación de camas". 

Pero en las últimas horas, con la ocupación de camas críticas por encima del 90 por ciento en Rosario, parecieron agotarse los tiempos de intentar evitar costo político y llegó la hora de tomar nuevas medidas. Las carteras de Salud de ambas administraciones fueron preparando el terreno, adelantando que sin disminuir la circulación del virus, puede haber colapso del sistema. "Los pacientes jóvenes resisten más al virus y te ocupan una cama de terapia intensiva por más de un mes", explican desde el sector sanitario.

Por eso, con planillas en la mano y los últimos datos sobre la evolución del virus, aunque también con la información de la actividad económica y de los próximos lotes de vacunas que están llegando al país, desde la provincia y el municipio se coincidió en una idea: "Restringir una parte de la circulación social, pero sin afectar la economía y garantizando las escuelas, que fue el foco de conflicto en el AMBA". 

Es que de repetirse el escenario de restricciones anunciado por Alberto Fernández para la Capital, los dueños de locales gastronómicos y de gimnasios, por ejemplo, serían los primeros en organizar los reclamos. Y los grupos de padres de algunas escuelas que vienen pidiendo más presencialidad, que ya mostraron los dientes la semana pasada, también harían ruido. Cabe recordar que hace dos semanas, fueron inclusive recibidos por la administración provincial.  

En ese marco, a la hora de dar los anuncios -que se harían este miércoles en forma oficial- RosarioPlus pudo saber que volverán a apelar sobre todo a respetar cuidados en forma individual y ajustar mecanismos de control. La suspensión de las competencias deportivas amateur serían el cambio más importante. En cuanto al resto de las medidas, el borrador sobre el que trabajan en estas horas los equipos de Perotti y Javkin, sería el siguiente. 

1) Suspender eventos deportivos amateur que puedan generar aglomeraciones (no las prácticas del deporte en clubes, que se podrán hacer con protocolos, pero que implican menor cantidad de gente)

2) Coordinar horarios de apertura y cierre de bancos y comercios, para evitar aglomeraciones

3) Restringir circulación vehicular nocturna desde las 20 hs, pero sin modificar el horario de locales gastronómicos que ahora pueden abrir hasta las 24 hs. Se deberá ir y volver a bares o restaurantes en transporte público o caminando.

4) Ampliar controles para verificar cumplimiento de las medidas por la noche, y protocolos de distanciamiento en la vía pública.

5) No modificar la presencialidad con burbujas en las escuelas

6) No modificar funcionamiento de fábricas, ni de gimnasios