La difusión de imágenes en las redes sociales de un festejo de unos 150 estudiantes del último año de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), realizado en La Florida, generó repudio y polémica por la falta de cuidados para prevenir contagios de coronavirus.

El festejo, conocido como "bajada" y que habitualmente realizan en el edificio de la Facultad los alumnos que terminan de cursar la carrera, se trasladó este año al predio municipal concesionado, ubicado en la costanera norte del río Paraná.

Las imágenes difundidas por las redes sociales muestran a unos 150 jóvenes tomando bebidas alcohólicas y sin barbijo ni distanciamiento entre ellos, en un contexto de aumento de los contagios de coronavirus.

El decano de la Facultad, Jorge Molinas, dijo este jueves que "vamos a averiguar bien de qué se trata, con mayor exactitud, para dialogar con ellos. Nos preocupa y queremos verificar".

Molinas aclaró que se trata de un festejo privado del que no participa la casa de altos estudios, pero de todos modos resaltó en declaraciones a Radio 2 que lo realizado por los estudiantes "va en contra de lo que promulgamos en la Facultad", que en febrero pasado retomó la presencialidad con burbujas de 6 alumnos y con "la aplicación de protocolos".

El festejo se realizó el miércoles entre las 14 y las 18 en el balneario La Florida.

Según el titular de la empresa municipal que administra el predio, Horacio Palavecino, los jóvenes hicieron su ingreso en grupos pequeños y se les revisó las conservadoras para evitar el acceso de bebidas alcohólicas.

Al comienzo, se distribuyeron en grupos por burbujas, que en el lugar están demarcadas con círculos para evitar el amontonamiento de gente.

"No sabíamos que iban a terminar siendo 150 ni que eran de la Facultad de Medicina", relató el funcionario en declaraciones a  "La Ocho".

Y agregó que "como a todos los asistentes les indicamos las normas de funcionamiento, el tema de los círculos, y los dispusimos en el área de fumadores que está bien delimitado, incluso con sogas".

Sin embargo, al avanzar la tarde los jóvenes terminaron reuniéndose en grupos que excedían el número permitido por protocolo e ingresaron bebidas alcohólicas al predio.

Finalmente, intervino el personal de seguridad del balneario y agentes de Guardia Urbana Municipal, y los estudiantes dejaron el lugar "en forma pacífica", dijo Palavecino.

El intendente de Rosario, Pablo Javkin, repudió el festejo de los jóvenes al asegurar que "al aire libre no se puede hacer cualquier cosa", sin los cuidados pertinentes como el uso de barbijos y el mantenimiento de distancia entre personas.