El nivel del Paraná continúa descendiendo y la bajante del río ya es la peor en cincuenta años. Para encontrar el registro récord hay que remontarse a 1944, cuando estuvo en menos 1,60 metros. Este viernes, la medición que hace Prefectura en el Puerto Rosario fue de apenas 11 centímetros. En este marco, el equipo de Sí98.9 y Rosarioplus.com cruzó al islote del Club Regatas, para ver de cerca el impacto de la situación, que tiene impacto económico, social y en la naturaleza.

"El paisaje cambia todas las semanas. Por ahí cruzás y tenés un árbol como referencia en la isla y cuando volvés no está más, porque se cayó la barranca", detalló Miguel, el lanchero de Regatas, un viejo conocedor de la zona que describió además cómo se complica la realidad para las familias que viven en la isla y como las quemas de los últimos meses también hicieron desaparecer buena parte de la fauna. 

Miguel, lanchero de Regatas, con el equipo de redes de RosarioPlus. Por donde entrenaban los remeros del club, se puede pasar caminando.
Miguel, lanchero de Regatas, con el equipo de redes de RosarioPlus. Por donde entrenaban los remeros del club, se puede pasar caminando.

En diálogo con el móvil de la Sí98.9 desde El Embudo, un rincón del Paraná históricamente utilizado por los remeros del club Regatas para entrenar, el mismo lanchero se lamentó: "Es una lástima ver esto así. Acá donde ves los camalotes todos secos y el barro, que se puede cruzar caminando, es adonde pasaban las embarcaciones. Ese bote que ves sobre el pasto y el muelle al lado, te marca que el agua a veces ha estado como cuatro metros más arriba. Ya esto viene de mucho tiempo, pero lo de ahora no lo vi nunca. Yo hace 25 años que trabajo cruzando a la isla".   

En la zona de El Embudo, donde practicaban los remeros y había una playa, el paisaje es desolador. El cronista de RosarioPlus lo pudo cruzar caminando.
En la zona de El Embudo, donde practicaban los remeros y había una playa, el paisaje es desolador. El cronista de RosarioPlus lo pudo cruzar caminando.

Desde la Bolsa de Comercio, en su último informe semanal emitido esta misma semana, uno de los subtítulos advirtió que "la carga de los buques sigue bajando", por la situación del río. "En lo que sigue, la bajante del Paraná, vía de salida de las cargas del principal nodo portuario de origen de granos, aceites y subproductos del mundo, preocupa cada vez más a los actores de la cadena. Como destaca el Instituto Nacional del Agua (INA), en la última semana no hubo precipitaciones en las nacientes del río Paraná a la vez que no se esperan lluvias en las próximas dos semanas. No conforme con ello, no se espera una mejora considerable en los meses venideros, de acuerdo con el INA, que proyecta un mes de julio especialmente crítico para la altura del Paraná. De esta manera, el tramo argentino del río podría alcanzar su altura más baja en 77 años, lo que ya comienza a sentirse en las cargas embarcadas en los puertos del Up River".

Un barco de Singapur, sobre el Paraná. La Bolsa de Comercio advirtió que las cargas están siendo cada vez menores, por la bajante.
Un barco de Singapur, sobre el Paraná. La Bolsa de Comercio advirtió que las cargas están siendo cada vez menores, por la bajante.

En tanto desde Aguas Santafesinas, su vocero Guillermo Lanfranco recomendó además tener un uso racional del agua: "Estamos siguiendo día a día el comportamiento del río, para saber si podemos sostener la capacidad de captación. Hasta ahora no hemos tenido que sumar las bombas que tenemos en reserva. Y si las tuviéramos que usar, no sabemos todavía si serán suficientes para responder al servicio. Por eso como forma de prevención, reiteramos el llamado a la población a cuidar el agua todo lo que se pueda. Para los edificios, por ejemplo, existe una ordenanza municipal vigente desde 2009 que sanciona a los consorcios que no utilicen mangueras con corte para el lavado de las veredas", señaló. 

"El paisaje cambia todas las semanas. Por ahí ves un árbol y cuando volvés ya lo arrancó la corriente porque se cayó la barranca", dijo el lanchero de Regatas al móvil de la Sí98.9
"El paisaje cambia todas las semanas. Por ahí ves un árbol y cuando volvés ya lo arrancó la corriente porque se cayó la barranca", dijo el lanchero de Regatas al móvil de la Sí98.9

Al momento de regresar a la ciudad, detrás quedan las postales de la bajante histórica y las orillas que se hacen cada días más grandes y barrosas. Para julio, según pronostican todos los informes, la situación será peor.