El médico especialista y director del Instituto de Salud Socioambiental de la Facultad de Medicina de la UNR, Damián Verzeñassi, fue consultado sobre los efectos que generan en la salud las quemas en las islas entrerrianas frente a la ciudad, y entre las posibles situaciones, se destacó la advertencia sobre los bebés en proceso de gestación.

“En 2020 publicamos un libro llamado La vida hecha humo, que se puede leer online, donde se recopila bibliográficamente lo que genera respirar humo de incendios forestales como los que tenemos frente a Rosario desde 2020, con investigaciones internacionales”, precisó el doctor, que luego enumeró los preocupantes efectos en la salud: “Esto provoca dificulta de respirar, irritaciones de mucosas y de ojos, e implica que ingrese menos oxígeno en nuestro organismo y empiecen las fallas, como problemas cardiovasculares y renales”.

Fue entonces que lanzó con preocupación: “Implica que bebés que hoy están siendo gestados en madres que respiran este aire dañado tendrán serios problemas de salud. Reciben menos oxigeno de lo necesario y pueden tener retraso madurativo o daños cognitivos al nacer. El daño puede ser transmitido en la genética de próximos procesos reproductivos”.

Damián Verzeñassi.
Damián Verzeñassi.

Según explicó, “esto está estudiado en Australia y Canadá, países que tuvieron serios incendios forestales y que nosotros tenemos que empezar a registrar”.

Consultado sobre qué se puede hacer para paliar esta situación preocupante, Verzeñassi destacó que “podemos garantizar el uso de mascarillas como se viene usando desde la pandemia, como filtro físico para las partículas más gruesas. Pero las más pequeñas sí o sí van a entrar en nuestros cuerpos. La única salida acá es que se frene el avance de la especulación agroindustrial, inmobiliaria  y ganadera en las islas de una vez por todas”.

El referente de salud ambiental destacó que “además del ecocidio es inadmisible la falta de acción de los responsables políticos y judiciales para garantizar el derecho a respirar aire puro. Las Naciones Unidas decretaron el ambiente sano que es un derecho humano, y no olvidemos que el humedal tiene entre sus funciones ser un pulmón del aire que nosotros respiramos. Perdimos los filtros naturales que nos daban el oxígeno”.

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