"Jamie vs. Britney: Juicios de familia", nueva serie documental de dos partes que repasa el ya visitado caso que enfrentó a la super popular cantante de pop Britney Spears con su padre, quien durante años ejerció una dura tutela judicial sobre la vida de su hija, podrá verse en la plataforma de streaming HBO Max desde el próximo 10 de enero.

Narrada desde las dos perspectivas que participaron del conflicto, la producción busca dar contexto a los eventos que se desataron en 2008, cuando la "Princesa del Pop" se encontraba en tratamiento psicológico por problemas personales y fue internada en un centro médico en dos ocasiones, y que finalizaron en noviembre de 2021, cuando Jamie Spears renunció a su cargo como tutor.

Para reconstruir más de una década de acontecimientos, "Juicios de familia" recurre a testimonios de diversos ejecutivos de la industria musical, profesionales que trabajaron con la cantante, miembros del #FreeBritney, imágenes de archivo e informes que intentan representar de manera paralela el recorrido que cada una de las partes llevó adelante durante el conflicto.

En ese sentido, la propuesta cuestiona si la controvertida medida tutelar se trataba en realidad de un acto de amor y protección por parte de Jamie Spears para resguardar a su hija en términos de salud mental, o si puede considerarse como un plan malintencionado para disponer del patrimonio de la artista.

Por eso, la trama se remonta a 2007, cuando la intérprete de hits como "Oops!...I Did It Again" y "Toxic" pasó a ocupar todas las tapas de las revistas sensacionalistas tras raparse la cabeza y agredir a un grupo de paparazzis con un paraguas, cuando se hallaba en plena crisis por su divorcio con el bailarín Kevin Federline y la pérdida de la custodia sobre sus dos hijos.

En ese momento, su padre solicitó a la Justicia de Los Ángeles la posibilidad de acceder a una tutela temporal de emergencia, que poco después se convirtió en permanente, y junto al abogado Andrew Wallet logró el control de los negocios, el patrimonio y las decisiones de índole íntima de Spears.

Trece años más tarde, las y los fans de la artista, preocupados por el dominio prácticamente absoluto y el estado de malestar en el que notaban a su ídola a través de las redes sociales y por sus comentarios, comenzaron a gestar el movimiento conocido como #FreeBritney.

La presión ejercida por sus seguidores y los intentos de renegociación de la medida tutelar finalmente llevaron al Poder Judicial estadounidense a revisar el acuerdo, y después de un extenso proceso, en noviembre de 2021 se dio por terminado.