Santa Fe es una de las provincias con más actividad agropecuaria del país, nuestras tierras son ricas en todos los sentidos, ya sea para cosecha o para ganadería, los santafesinos cada año resaltamos por la calidad de nuestros suelos.

Es que solo nuestra provincia cubre el 21% del territorio sembrado de la República, siendo la número uno en la producción de cereales, como trigo, maíz y sorgo. También, se posiciona como la segunda, por debajo de La Pampa, en la producción de semillas oleaginosas como lino, girasol y soja.

Pero esto no es todo, también se trabaja la horticultura y fruticultura, el cultivo de algodón, la ganadería, pesca y la apicultura. Básicamente, casi todo lo que implica, el vulgarmente llamado, “trabajo de campo”, puede llevarse adelante en nuestra provincia.

Sin ir más lejos, nuestra querida Rosario es una de las pocas ciudades del América Latina y el Caribe, que incorporó a la agricultura en su plan de desarrollo urbano. Esta acción impulsa a familias a trabajar sus huertas, ya sea para el consumo interno del grupo o del mercado.

¿Qué necesitamos para ser parte del mundo agrícola santafesino?

Si tenemos un par de hectáreas y estamos pensando en invertir en este sector, estemos tranquilos de que será una apuesta segura. Pero, es muy importante que nos asesoremos sobre calendarios, características y necesidades del terreno. Lo mejor será ponernos en contacto con un especialista.

Pero, un punto esencial será el contar con maquinaria que nos permita agilizar tiempos y trabajo. Comprar cosechadoras, sembradoras y tractores, será una inversión de la que no podremos escapar si pensamos hacer las cosas bien y sin morir en el intento.

Primeramente, deberemos contar con un buen tractor. Este elemento será nuestro amigo fiel durante todas las campañas. Es un vehículo que se caracteriza por su fuerza, versatilidad y adaptabilidad a cualquier tarea.

Por supuesto que tendremos que estar al tanto de las necesidades a cubrir y las características del suelo. De esto dependerá el tipo de tractor que necesitemos comprar, su tamaño, ruedas y tracción.

Luego de esta adquisición, en el mercado encontraremos varios accesorios que podremos sumarle para llevar adelante las diferentes actividades típicas de la época de cosecha y siembra. Algo que podría sernos muy útil será comprar tolvas.

Puede que nunca hayamos escuchado hablar sobre esta maquinaria, pero demos por sentado que si estamos pensando en cultivar plantas como soja o trigo, este elemento será un camino de ida.

Una tolva es un contenedor de granos o productos líquidos, en forma de embudo. Es muy liviana, en comparación con otros insumos agrónomos, ya que, cuando se llena, su peso se multiplica rotundamente.

En esta herramienta, contendremos nuestra cosecha y, a medida que la vayamos necesitando, solo deberemos abrir la boca de abajo para que los granos, o el líquido, salgan, y cerrarla cuando no queramos más.

Al adquirirla deberemos asegurarnos de que el material que recubre internamente la tolva, sea bueno y antiadherente, para que no se presente ningún problema a la hora de soltar el producto. Podemos optar por un modelo que tenga agarre para poder transportarlo con el tractor.

El orgullo agrícola santafesino

La soja, el oro santafesino

La temporada pasada (2019/2020) de soja en la provincia, fue una de las mejores campañas en el registro histórico santafesino. Es que este cultivo se convirtió en uno de los proferidos de los medianos y grandes productores locales.

La variedad de soja que plantemos, será nuestra elección. Hoy existen casi 130 variedades de esta planta, que se va modificando y alterando mediante experimentaciones, para adaptar la semilla a las características de la zona.

El mejor mes para iniciar nuestra campaña es, como muchos sabemos, octubre/noviembre. Aunque, hay algunos valientes que prefieren extenderse hasta finales de diciembre, cerca de la fecha de inicio de la campaña del trigo. 

Al momento de cosecharlo y almacenar la producción, es donde la Tolva aparecerá y hará su magia. ¡Aquí nos daremos cuenta de la buena idea que fue adquirirla!

Ya lo sabemos, si estamos pensando en activar nuestras tierras y empezar a sacar un poco de dinero de ellas, no perdamos más tiempo. Contactémonos con un especialista, estudiémoslas y adquiramos lo necesario para que esta sea la inversión de nuestras vidas.